La Asamblea acaba de aprobar la Ley del Servicio Eléctrico, según la cual se quita la obligación de las empresas del ramo de cobrar el impuesto creado por la Ley de Defensa Contra Incendios en favor de los cuerpos de bomberos, obligándoles a estos a firmar periódicamente con aquellas, convenios para la recaudación.
Por otra parte, mediante una reforma a la Ley de Tránsito se les quita a las empresas aseguradoras la atribución de cobrar el SOAT a los dueños de vehículos para garantizar el pago de eventuales daños y perjuicios causados a terceros, entregándole esta facultad a la empresa que seleccione la Agencia Nacional de Tránsito.
Los cambios, vale preguntarse ¿son procedentes o no? ¿Se están simplificando los trámites o no? O mejor se los está complicando? ¿Hay que recordar que las empresas eléctricas no solo recaudan a nombre de terceros el impuesto creado en favor de los bomberos, sino la tasa por recolección de basura que beneficia a los municipios.
En el caso del SOAT, ¿la empresa que escoja la ANT dispondrá de la estructura administrativa para sustituir los cientos de puestos que existen para su cobro o no. ¿Se ha pensado en todas estas complicaciones burocráticas?