Stephen Leahy
IPS
Será imposible acabar con la pobreza extrema y el hambre con el rápido recalentamiento del planeta, plagado de sequías, inundaciones catastróficas y un clima cada vez más inestable, dijeron activistas que participan en las negociaciones de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) dio a conocer el borrador de los 17 ODS luego de 18 meses de discusión entre más de 60 países.
Los ODS son un conjunto de metas y objetivos destinados a eliminar la pobreza extrema y lograr el desarrollo sostenible. Cuando estén definidos en el 2015, al término de los ocho Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), los ODS se convertirán en el itinerario que seguirán los países para sus políticas y decisiones ambientales y socioeconómicas.
“Los desastres naturales son un motivo importante del incumplimiento de muchas de las metas de los ODM”, afirmó Singh Harjeet, de Action Aid International, una organización de desarrollo internacional con sede en Johannesburgo.
“Una inundación grande o un tifón pueden retrasar el desarrollo de una región en 20 años”, explicó Singh, el coordinador internacional de mitigación de riesgos de desastres en Action Aid.
Los tifones son ciclones tropicales con vientos superiores a los 118 km por hora. Singh recordó que el tifón Haiyan mató a más de
6 000 personas y dejó a casi dos millones de damnificados en Filipinas en el 2013. Menos de un año antes, en diciembre del 2012, el país sufrió el paso del tifón Bopha, que causó más de 1 000 muertes y unos 350 millones de dólares en daños.
En las últimas dos semanas dos tifones afectaron al país asiático, que podría padecer 20 tormentas más antes de que concluya la temporada en octubre.
“Los desastres naturales repercuten en todo: la seguridad alimentaria, la salud, la educación, la infraestructura, etc. Usted no puede salir de la pobreza si tiene que reconstruir su casa cada dos años”, comentó Singh.
Los objetivos de eliminación de la pobreza o casi cualquier cosa propuesta por los ODS “no tienen sentido sin la reducción de las emisiones de carbono”, aseguró.
Las emisiones de carbono producidas por la quema de petróleo, carbón y gas atrapan el calor del sol. Esta energía calórica adicional equivale a la explosión diaria de 400 mil bombas atómicas, similares a la que destruyó la ciudad japonesa de Hiroshima en 1945, los 365 días del año, según James Hansen, climatólogo y exdirector del Instituto Goddard de Estudios Espaciales de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio de EE.UU. Ahora el planeta es 0,8 grados más cálido.
“El cambio climático repercute en todos los fenómenos meteorológicos porque el entorno en el que suceden es más cálido y húmedo de lo que solía ser”, explicó Kevin Trenberth, científico del Centro Nacional de Investigación Atmosférica.
El cambio climático no necesariamente provoca los desastres naturales, pero no hay duda de que los agrava.