Ante los vanos intentos por dar a conocer al estamento oficial un proyecto para minimizar el consumo eléctrico, sin consumo de combustible aspiro lograrlo por este medio, tras cinco años, sin poderlo sintonizar con persona, o entidad alguna, que colabore con el proyecto y la oportunidad de potenciar plazas de trabajo, dentro de la Matriz Productiva.
En el 2012, la Revolución Ciudadana emitió 808 millones para el desarrollo nacional, al fin esperé impulsar este emprendimiento, más, para el departamento de crédito del BNF, y el CFN, no tuve posibilidades, y mis hijos emigraron para materializar el mismo.
Evidente es el vacío de quienes auxiliaban económicamente al ciudadano, desvinculado del influyente medio económico, que hoy deambulamos, impotentes, sin oro ni joyas, algún emprendimiento, ante el Biess, está anulado. Y tras tocar puertas inútilmente, aspiro con esta carta, a que la Revolución Ciudadana me ayude brindándome, una oportunidad para materializarlo.