La mala sincronización de los semáforos causa congestión. Ayer, la luz roja obligó a Pedro Toaliza a frenar en la intersección de las avenidas Diego de Vásquez y De la Prensa. Eso, pese a que una cuadra más adelante el semáforo estaba en verde.Toaliza dice que este tipo de errores en la semaforización frena su recorrido. “La luz roja me para en una cuadra, mientras en la siguiente hay luz verde”.
En esa intersección se formó una fila de otros seis vehículos frente a la señal de tránsito. Sin embargo, en la siguiente cuadra, sobre la avenida De la Prensa, no había ningún vehículo y el semáforo estaba con luz verde.
Cuando Toaliza aceleró tuvo que detenerse a la cuadra siguiente, porque la luz cambió a rojo. “Esas son las cosas que a uno le hacen perder el tiempo”.
Otro problema en esa vía tiene que ver con los giros a la izquierda. Las señales de tránsito tampoco ayudan a partir de inmediato a los choferes de los autos que van a realizar el giro. Por eso se encolumnan los carros.
Carolina Salazar viaja a diario desde Carcelén hasta la Plaza Foch, donde trabaja.
Ella tiene un Peugeot gris y comenta que siempre tiene problemas en esa intersección, porque los semáforos de av. De la Prensa no funcionan adecuadamente. “La luz roja del aparato nos detiene cada dos cuadras”.
La falta de sincronización de los semáforos no es un problema nuevo para el Municipio. Según las autoridades, la falta de un sistema óptimo se debe a que la administración de las 780 intersecciones semaforizadas están a cargo de la Policía Nacional (368) y de la Empresa de Obras Públicas (412).
Jesús Gómez, experto en seguridad vial, reconoció que la falta de coordinación de semáforos causa congestión, saturación de las vías, pérdida de tiempo y contaminación ambiental.
El experto añadió que un carril tiene capacidad para que circulen entre 1 000 y 1 200 carros por hora. “Si hay semáforos que funcionan con tiempos fijos, no ayudan a dar fluidez al tránsito”.
Lo ideal es que esos aparatos no cambien de luz en lapsos determinados, sino que lo hagan según el nivel de circulación.
En un sistema óptimo, un conductor que va por la av. Amazonas debería circular sin problemas desde la av. Eloy Alfaro (sur-norte) hasta la Gaspar de Villarroel. “Pero con el actual sistema, solo se puede avanzar hasta la Mariana de Jesús”.
Problemas en un cruce vial
En la av. Alfredo Pérez Guerrero hay dos problemas con los semáforos. La primera dificultad que tienen los conductores es la falta de una señal que dé el paso a los choferes que vienen en el carril oriente-occidente y deben girar hacia la izquierda, hacia la calle Versalles.
Ante la falta de una señal que les dé paso, los choferes deben esperar a la luz verde de la Pérez Guerrero y cruzar entre los autos que van de oeste a este.
Estela Granja estaba ayer en la vereda de la Pérez Guerrero, esperando por un bus. Señaló que en dos ocasiones ha mirado choques en este sector. “Los autos deben cruzar cuando pueden y algunos vienen a toda velocidad. Por eso son los accidentes”.
La segunda dificultad de los choferes es en el carril que va de oeste a este. Eso, debido a que en la intersección de la calle Versalles, la luz verde les da paso, pero en la siguiente cuadra, en la calle Bolivia, el semáforo está en rojo.
Esto genera que se formen largas filas de automotores. Además, allí confluyen los autos que giran en U por la Pérez Guerrero, para cambiar de carril.
Pero a estos dos problemas también se suma una parada improvisada de buses que funciona en la esquina de la Versalles y Pérez Guerrero.
Las unidades de transporte público frenan en la intersección e impiden la circulación de los autos que vienen por la Versalles, de norte a sur. Por eso, es común observar trancones en esa transitada intersección.
La luz roja, cada dos cuadras
Belén Santamaría se moviliza por la avenida 6 de Diciembre, de lunes a viernes. Lo hace en sentido norte-sur, porque vive en Bellavista y trabaja en La Alameda, en el centro.
Ella contó que siempre tiene problemas para cruzar la plaza Argentina. “En ese lugar hay mucho tráfico, que incluso llega hasta la Diego de Almagro”.
El problema en este lugar es que los conductores que cruzan con la luz verde por el redondel de la plaza hacia la 6 de Diciembre deben detenerse abruptamente en el semáforo que está en la parada San Martín de la ecovía. Esta señal permite el paso de los usuarios de ese sistema de transporte masivo.
La luz roja de este lugar frena a los conductores, que luego de unos 30 segundos avanzan a menos de 10km/h. Se vuelven a detener en el otro semáforo, ubicado a una cuadra, en la calle Pedro Ponce Carrasco.
Una vez que se cruza esta intersección, la luz verde permite el paso de los autos hasta la intersección con la av. República. Desde allí, el semáforo se pone en luz roja nuevamente en la intersección con la av. Orellana. Lo mismo se repite en el cruce con la avenida Colón.
Pedro Utreras, taxista, se queja por la falta de fluidez en la 6 de Diciembre. Dice que no se puede ir rápido por esta avenida y que los problemas de sincronización de semáforos se repite en la intersección con la av. Gaspar de Villarroel y con la av. Río Coca. “Se pierde tiempo y dinero”.