Gustavo Moscoso y Olga Doumet, diseñadores de moda ecuatorianos, se enfrentan todos los días con el reto de crear, con hilo y telas, piezas que se acomoden a las formas del cuerpo humano. Mediante cortes y ensamblaje comparten sus visiones del mundo y buscan ofrecer, más que ropa, estilos de vida.