¿Así trataba Rafael Correa a los de su entorno o bajo su régimen?.
Vasallos –siglos atrás- eran quienes estaban al servicio de un señor feudal, que les daba protección a cambio de su sometimiento.
La mención no es de mi autoría, sino de una persona que ocupó una importante función en la década del correato, explicándome que él sólo cumplía órdenes, pero que a él le glosan y no a Correa. En sus palabras: “Correa estará disfrutando en Europa y los vasallos con riesgo de perder bienes y hasta la libertad”.
Y hablé con alguien del actual gobierno y le pregunté “no te sientes desleal con Correa”. Su respuesta fue “me liberé de él, me sentía ofendido cada vez que me imponía decisiones que tenía que acatar, porque, caso contrario, me quedaba sin trabajo y quizás perseguido; y, más me auto ofendía cuando tenía que llevar a funcionarios y empleados a las sabatinas a aplaudir, sabiendo yo que aquellos me consideraban perro de Correa. Con Moreno es diferente, sabe tratar a las personas”.
Yo viví lo cotidiano en la Asamblea Constituyente de Montecristi, 2007-2008. Primero en la Mesa 10 de Legislación y luego en el Pleno se debatía sobre puntos interesantes, tomada una decisión, había que esperar el acta, pero lo que llegaba escrito usualmente era muy diferente de lo que se había discutido y decidido. “Viene de arriba”, decían.
Alberto Acosta prefirió renunciar a la Presidencia de la Asamblea. Otros asambleístas expresaban su desagrado. Con Martha Roldós y Luis Hernández, fuimos radicales, nos negamos a votar la “versión final”, enviada desde Quito, porque introducía textos no debatidos en la Asamblea. Inclusive, yo formulé denuncia a la Fiscalía.
Rafael Correa es obsesivo, detallista.
Es evidente que falta a la verdad cuando dice cosas como aquella de que el año 2005 firmó en escritura pública la compra de su casa en Quito por un valor inferior a USD 3 000, cuando la compraba en más de 40 veces ese valor, sólo porque así le trajeron la matriz elaborada en un “banco” y él la suscribió. ¿Era tan desaprensivo, al tiempo que ya había sido Ministro de Finanzas y era candidato a la Presidencia?
¿Correa estará dispuesto a hacer una escritura reformatoria para que conste el precio real que pagó por el inmueble, cubriendo los tributos que corresponda? Sería un acto de honestidad. En cambio, alegar prescripción, para no rectificar ni pagar los tributos que dejó de pagar, sería éticamente deshonesto.
Correa era omnipresente y omnisapiente en su gobierno, ¿Será creíble lo que habría declarado sobre los créditos vinculados con supuestas preventas de petróleo, de que él no entraba a los detalles legales, económicos y técnicos?
Sólo los vasallos a la cárcel, ¿qué piensa lector?