@flarenasec
Si alguien compra un kilo de papas paga el precio exacto, pero si las papas que quiere llevar pesan un kilo y 200 gramos pagará por esa cantidad y no por dos kilos, ni por uno. Si el taxímetro marca dos dólares paga eso, pero si marca 2.15 no tendría por qué pagar 3, a modo de redondeo. Pues bien, en el caso de los parqueaderos públicos o privados funciona diferente; si estuvo estacionado menos de una hora paga por una entera y si se pasó un minuto paga por dos horas. ¿Es eso correcto o justo? Partamos por destacar que no es lo mismo estacionar en la calle que en un lugar cerrado, a la sombra y con comodidad.
Últimamente ha proliferado la oferta de parqueos en centros comerciales, hoteles, en edificios o en sitios vacíos. Quienes se dedican a esa actividad han invertido para que funcionen bien, tanto administrativa como técnicamente; y generan puestos de trabajo. En las calles o en lo que se conoce como “zona azul”, quienes trabajan ahí son más flexibles con el usuario que se pasó unos pocos minutos y no cobran otra hora adicional.
El costo del parqueadero en sitios privados está sujeto a la oferta y a la demanda. Algunos son serios y se responsabilizan por robos o por choques en el interior, otros no. Muy pocos exigen que quien entra a un estacionamiento encienda las luces para advertir a otros automovilistas y evitar choques. Algunos son amplios y el usuario puede abrir la puerta sin rozar al carro que está al lado, otros son incómodos. Existe conciencia de algunos administradores de parqueaderos para facilitar mejores espacios a personas con capacidades físicas diferentes o para mujeres embarazadas, claro que los más prepotentes (o ignorantes) no siempre los respetan.
Lo único que no tiene lógica en este esquema es el “redondeo” exagerado. Lo justo sería que si el carro estuvo estacionado una hora y un minuto o 10 minutos más, se cobre eso. ¿Es tan complicado facturar lo justo?
Si el consumo de energía eléctrica o de minutos en las llamadas telefónicas no se sube o no se redondea por fracciones más de megavatios o de segundos, entonces ¿por qué se permite que, en el caso de los parqueaderos, se cobre por un tiempo que no se ha consumido?
Hasta hoy lo único regulado era el parqueo municipal; la buena noticia es que en pocos meses más los estacionamientos privados que ofrecen sus espacios al público serán incorporados al nuevo sistema de estacionamiento. Cada zona es diferente, la tarifa no puede ser la misma y lo que se busca es fomentar el uso del transporte municipal. En la nueva ordenanza se establece que la tarifa básica de los vehículos livianos corresponderá a las dos primeras horas de ocupación; a partir de la tercera se aplicará un incremento del 50% por cada hora adicional; esto parece mucho más sensato que la hora o fracción.