Acaba de publicarse en Cuenca la historia novelada de uno de los casos más tristes y vergonzosos de nuestra historia: la desaparición de un avión que volaba de Quito a Cuenca y que permaneció en el misterio por 27 años.
Por deformación profesional producida por 40 años de dedicación al periodismo, me desagrada la mezcla de la realidad y la ficción y por ello no soy devoto ni de la historia novelada ni de la novela histórica y, sin embargo, he leído con devoción la obra de Heidi Houpt de Gallegos, titulada ‘Hannes’. La autora, de origen alemán, desposada con ecuatoriano, vive en Ecuador desde 1968. La tragedia cambió su vida. En 1976 desapareció misteriosamente el avión en el que viajaba su hijo Hannes, de 11 años, y otros 59 pasajeros. Aunque la historia es dolorosamente real, la autora narra su experiencia en tercera persona como si fuera ficción, seguramente para poner distancia emocional y juzgar mejor los hechos y, sobre todo, la conducta de las personas que participaron, algunas positivamente tratando de ayudar a descubrir la verdad; otras, desgraciadamente, para evitar la verdad por intereses miserables.
Concebimos la muerte como descanso; apagada la claridad, como decía Cátulo, “hemos de dormir una sola y eterna noche”, por ello la desaparición es peor que la muerte, no sabemos si el desaparecido, nos busca y nos necesita, si sufre y resiente el olvido. Ante la muerte cabe la resignación, pero ante el desaparecido, conformarse puede parecer traición. ¡Qué cruel e inhumano luce el juego con los sentimientos de los familiares, tan vívidamente descritos en la obra de Heidi Houpt. Todo lastima la sensibilidad de los seres queridos que no abandonan la esperanza: la indolencia de autoridades; la mezquindad de los responsables de la línea aérea interesados solo en evitar el desprestigio; el secreto con el que se encubren militares de mala conciencia; la codicia de quienes descubrieron los despojos y callaron con la intención de sacar provecho. Todos pasan por el recuento de una búsqueda sin fatiga, incluso periodistas mediocres especializados en el escándalo y gentes de mala fe que ofrecen pistas falsas. ‘Hannes’ no solo es el testimonio conmovedor de una madre sufrida y valiente que vio a su esposo agotarse hasta morir sin conocer la suerte de su hijo, una madre que hasta el día de hoy mantiene las preguntas que no tuvieron respuestas; es la historia de una época saturada de tragedias, envilecida por la corrupción y la impunidad; enturbiada con la argucia del secreto de estado. Una obra que hay que leer para conocer, para recordar, para advertir hasta qué extremos puede llevar la falta de transparencia. Una historia que hay que leerla, aunque sea una historia triste.