Atraer inversiones es una de las prioridades que se ha trazado el Gobierno a partir de la presentación del plan económico. Para alcanzar este objetivo, entre las 14 medidas se contemplan incentivos tributarios relacionados con el impuesto a la renta y el impuesto a la salida de divisas; además, hay un capítulo específico para atraer a la banca internacional que financie créditos de inversión. Y para ello se espera que en los próximos días el Ejecutivo envíe a la Asamblea un proyecto de ley que reforme la normativa que rige para la banca.
¿A la banca extranjera le interesa llegar? Al menos dos son los aspectos que se deben considerar. Uno, tiene que ver con el tamaño del mercado. ¿Ecuador es atractivo? El otro tiene que ver con toda la normativa que ahora regula al sector. Allí está el Código Monetario y Financiero, que con sus 520 artículos y 18 disposiciones, no es el mejor instrumento para cautivar a los bancos internacionales.
A eso también hay que añadir que los accionistas solo deben tener participación en la banca y no en otro tipo de negocio. Obviamente esto no es atractivo, para los grandes bancos internacionales que tienen portafolios diversificados para sus inversiones.
Pero no solo eso. La influencia del Gobierno en el sector financiero también se traslada hacia el manejo de la liquidez y hasta en la definición de las tasas de interés. Por todo ello, si se ponen en marchas las reformas legales estas tardarán tiempo en ser eficaces.
Sin embargo, hay otros ámbitos que también pesan a la hora de ser atractivos para los inversionistas y esto se enfoca en los Tratados Bilaterales de Inversión. Estos fueron denunciados por el anterior Gobierno y por ahora no hay mayores detalles de los futuros Convenios Bilaterales de Inversión, que quiere poner en marcha el Ejecutivo. Una de las mayores preocupaciones se concentra en las resoluciones de controversias.
La tarea es ardua, si el país quiere ser destino de grandes inversiones. ¿Lo podrá lograr en los tres años que le restan al Gobierno? Difícil de saber. La tarea es cuesta arriba.