Los instrumentos como vasijas y guitarras reflejan la integración con otras culturas. Foto: Álvaro Pineda para EL COMERCIO.
La historia del pueblo afrodescendiente se difunde en la Sala Etnográfica Nuestros Ancestros de la parroquia Santa Catalina de Salinas, ubicada en el norte de Ibarra.
El lugar, que pertenece al barrio La Esperanza de esta localidad imbabureña, se abrió hace ocho años.
Durante este lapso se han implementado varios espacios que describen el pasado de esta etnia originaria de África.
La muestra relata el traslado y la trata de esclavos que diseminó a su población por varios países del mundo.
También incluye una breve biografía de personajes que se han destacado a escala internacional. Se trata de figuras como Kofi Annan, exsecretario general de las Naciones Unidas; Barack Obama, expresidente de Estados Unidos; Martín Luther King, activista por los derechos civiles.
Un lugar destacado está dedicado a la keniana Wangari Maathai, premio Nobel de la Paz de 2004, por su contribución al desarrollo sostenible.
La finalidad es que la gente de esta comunidad afrochoecuatoriana valore las tradiciones de sus ancestros y que los visitantes conozcan el origen de este pueblo, dice Yesenia Ferigra, vocal de la junta parroquial local.
El recorrido se inicia en un mapa interactivo del territorio ancestral conocido como Chota-Salinas-La Concepción y Guallupe, que se extiende entre Imbabura y Carchi.
Con luces rojas se identifican en el plano a las parcialidades de la primera provincia. Mientras que, con un tono verde, a las carchenses.
En total son 38 comunidades que están asentadas a las orillas de las cuencas de los ríos Mira y Chota. Este es el asentamiento afroecuatoriano más importante de la Sierra norte.
Precisamente, en esas localidades se desarrolló, hace cuatro años, una investigación sobre etnohistoria, cultura y saberes ancestrales.
En los encuentros culturales se recogió testimonios de adultos mayores. Ellos han sido claves para fortalecer la memoria de este pueblo, asegura Ferigra. Por eso, en fichas que son parte de esta sala se sistematizaron los relatos.
La sala etnográfica también es parte del proyecto turístico que se desarrolla en esta jurisdicción desde el 2005.
En el mapa interactivo también constan la estación del tren, la plaza artesanal, la iglesia Santa Catalina de Salinas, el centro gastronómico Palenque, que son los principales atractivos de la localidad.
Dos esculturas de un hombre y una mujer, de tamaño natural, sobresalen en el salón. Las figuras, que visten trajes de color blanco y azul, son de autoría de Alicia Billalba, una reconocida artista local.
El sitio atrae a estudiantes y viajeros. Seis guías de turismo comunitarios especializados en etnocultura son los encargados de dirigir en la sala.