Tras haber quedado con 2-0 abajo el viernes después de los dos primeros individuales, Feliciano López y Marcel Granollers tenían la misión de ganar para que España llegara con vida al domingo, pero fueron superados en tres mangas por Julien Benneteau y Nicolas Mahut. Foto: Agencia AFP
Francia se clasificó para su segunda final consecutiva de Copa Davis y defenderá en ella el título conquistado el año pasado, tras ponerse con un contundente 3-0 ante España, este sábado en Lille, después de la victoria en el partido de dobles.
Tras haber quedado con 2-0 abajo el viernes después de los dos primeros individuales, Feliciano López y Marcel Granollers tenían la misión de ganar para que España llegara con vida al domingo, pero fueron superados en tres mangas por Julien Benneteau y Nicolas Mahut, que vencieron por 6-0, 6-4 y 7-6 (9/7), en 2 horas y 3 minutos.
Del 23 al 25 de noviembre, Francia disputará la final contra Croacia o Estados Unidos, los integrantes de la otra semifinal, donde los primeros van dominando 2-1 en Zadar. Si los croatas se llevan esa eliminatoria, la final se disputaría en suelo francés, mientras que los norteamericanos serían anfitriones en caso de lograr la remontada.
Nunca antes España había conseguido ganar una eliminatoria de Davis después de haber quedado 2-0 abajo tras el primer día y la maldición se cumplió en esta ocasión por la vía rápida.
Sin Rafa Nadal, baja por lesión para esta eliminatoria, los españoles llegaban como una incógnita que empezó a despejarse en el peor de los escenarios el viernes, con las derrotas de un lesionado Pablo Carreño y Roberto Bautista contra Benoît Paire y Lucas Pouille, respectivamente.
Ahora España tendrá como objetivo salvar el honor y no terminar con un 5-0 adverso, algo que únicamente le ocurrió en cinco eliminatorias de Copa Davis a lo largo de su historia, la última en los cuartos de final de 2010, precisamente en Francia.
“Sólo podemos felicitarles. Francia ha hecho una semifinal estratosférica. Nosotros lo hemos intentamos todo, también hemos jugado muy bien”, estimó el capitán español, Sergi Bruguera, que sufrió así su primera eliminatoria perdida desde que llegó al cargo al principio de esta temporada.
La final de este 2018 tiene además un aliciente añadido para los galos, ya que se trata de la última edición con el formato clásico, antes de la revolución aprobada para 2019.
“Tenía miedo de los españoles. Y ahora estamos con 3-0, sólo dos sets perdidos en tres partidos, un fin de semana lleno de cosas bonitas. Estas son cosas de las que nos acordaremos en el futuro”, afirmó el capitán de Francia, Yannick Noah, tras la victoria de este sábado.
“Tengo la impresión de que si Nadal hubiera jugado creo que podríamos haber ganado 3-2. Hemos hecho un gran trabajo”, llegó a pronosticar.
Inicio catastrófico
En el partido de dobles de este sábado, todo fue mal para los españoles desde el principio.
El primer set apenas duró 18 minutos y la pareja francesa dominó por completo a los españoles, con tres quiebres de servicio y un juego agresivo y eficaz, para un rápido 6-0.
El primer juego español, a saque de Granollers, llegó en el inicio del segundo set, pero en el tercer juego del mismo los franceses consiguieron un ‘break’ a saque de Feliciano López, para distanciarse instantes después a 3-1.
A partir de ahí cada uno fue ganando su saque, con lo que los franceses mantuvieron su margen y terminaron venciendo por 6-4.
En el inicio tercer set, España logró por fin su primer quiebre de servicio, después de una hora y diez minutos de partido. Ello le ayudó a ponerse luego 3-0 y 4-1 arriba, lo que hacía pensar en poder forzar un cuarto set.
Pero la pareja francesa no estaba dispuesta a retrasar más la victoria, en el séptimo juego devolvió el ‘break‘ a los españoles y el partido llegó luego al ‘tie-break’, donde los locales vencieron 9/7 y desataron la fiesta en Lille.
En la otra semifinal, Croacia, que había ganado el viernes los dos primeros puntos gracias a Marin Cilic y Borna Coric, no pudo clasificarse este sábado al perder el dobles ante Estados Unidos, que reduce a 2-1 su desventaja.
En un durísimo encuentro, Ryan Harrison y Mike Bryan se impusieron 7-5, 7-6 (8/6) , 1-6, 6-7 (5/7) y 7-6 (7/5) a Ivan Dodig y Mate Pavic.