En Italia, el covid-19 ya ha contagiado a 120 000 personas. Foto: EFE
El covid-19 ya se cobró más de 40 000 vidas en Europa, de ellos más de dos tercios en Italia, España y Francia, pero el Reino Unido batió su propio récord de decesos diarios este 3 de abril del 2020 y Estados Unidos presentó el peor dato, con casi 1 200 fallecidos en una jornada, una cifra que ningún país había alcanzado hasta la fecha.
En Estados Unidos, donde aún hay gobernadores que no han decretado medidas de confinamiento, la tensión crece.
Además de los 1 169 muertos registrados en una jornada, y de los casi 250 000 afectados, Washington tiene ante sí otro desafío que puede provocar una depresión económica: el desempleo.
En dos semanas casi diez millones de estadounidenses pidieron subsidio de desempleo, y este viernes 3 de abril se informó que la tasa oficial subió del 3,5% al 4,4% en un mes, de febrero a marzo.
España, el segundo país por detrás de Italia en saldo de muertos, volvió a superar este 3 de abril los 900 muertos, como la víspera, y ya se acerca a 11 000 decesos.
Las autoridades sanitarias españoles insisten en que las hospitalizaciones y contagios siguen bajando.
En Alemania las medidas de restricción también empiezan a surtir efecto, según el gobierno. Las cifras dan “esperanza” pero aún es “demasiado pronto” para suavizar las medidas, explicó la canciller, Angela Merkel.
Y si el coronavirus pone a prueba el sistema federal en Estados Unidos, en la Unión Europea se trata de la solidaridad entre países.
El ministro de Finanzas alemán, Olaf Scholz, dijo el viernes que la Unión Europea debería activar el fondo de rescate del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) para apoyar a los Estados cuyas economías son las más afectadas por la crisis del coronavirus.
España y Italia presionan para que se emita deuda europea, los denominados “coronabonos”, que Alemania y Holanda rechazan.
En Gran Bretaña se registraron otros 684 muertos, batiendo su propio récord de decesos diarios, mientras el gobierno ultima la construcción de un gigantesco hospital de campaña con 4 000 camas. El primer ministro, Boris Johnson, que dio positivo, seguirá convaleciente una semana más, aunque lleva las riendas del gabinete.
La reina Isabel, de 93 años, se dirigirá a la nación el domingo 5 de abril, la cuarta vez que lo hace en sus 68 años de reinado.
Competencia despiadada
Ante una pandemia que alarga su sombra sobre todo el planeta, los países se organizan y afrontan como pueden la penuria de material y las exigencias de seguridad no solo del personal sanitario, sino de otros sectores económicos que deben seguir funcionando.
La competencia que ha desatado esa situación es despiadada.
“Los mercados de suministro para el coronavirus se están colapsando”, señaló el profesor Christopher R. Yukins de la Universidad de Washington en una videoconferencia.
Los compradores no son solo gobiernos, sino regiones, empresas, hasta legisladores que acuden a fábricas, puntos de distribución, dispuestos a llevarse mascarillas, equipo médico, lo que sea pagando en efectivo y el precio que les pidan.
“Nuestros cónsules que van a las fábricas chinas se encontraron con colegas de otros países que querían arrebatarnos nuestros pedidos (…) Tenían más dinero en efectivo. Cada cargamento es una lucha” explicó vía Facebook un diputado ucraniano, Andrii Motovylovet.
El presidente estadounidense Donald Trump y el francés Emmanuel Macron hicieron un llamamiento para una “mayor cooperación” en el seno de la ONU.
Paradójicamente, el coronavirus ha reducido los enfrentamientos en escenarios bélicos como Siria o Yemen.
Pero en esos países, ahora a causa del coronavirus, “lo peor está por llegar”, advirtió el secretario general de la ONU, Antonio Guterres.
En Libia, un país arrasado por la guerra civil, se registró el primer muerto por covid-19. También se registró un caso en Beni, donde surgió la epidemia del ébola, en República Democrática del Congo.