El secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, Nikolái Patrushev (d), estrecha la mano del asesor de seguridad nacional estadounidense, John Bolton, durante su reunión en Moscú, Rusia, hoy, 22 de octubre de 2018. Foto: EFE
El consejero de la Casa Blanca para la Seguridad Nacional, John Bolton, se reunió este lunes, 22 de octubre del 2018, en Moscú con el canciller ruso, Serguéi Lavrov, que espera “aclaraciones” pocos días después de que Washington anunciara su intención de retirarse de un tratado sobre armas nucleares de mediano alcance de la época de la Guerra Fría.
Esta visita, prevista desde antes que Donald Trump anunciara su decisión el sábado 20 de octubre de retirar a su país del tratado de armas nucleares de alcance medio INF (Intermediate Nuclear Forces Treaty) rubricado con Rusia durante la Guerra Fría, ya era importante ‘per se’, al tratarse de la primera visita de un alto funcionario estadounidense a Moscú en varios meses.
El encuentro entre Bolton, considerado como un “halcón” de la administración Trump, y el ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, comenzó al anochecer. Moscú espera que el asesor estadounidense explique la posición de Washington sobre el tratado INF.
También se reunirá con el presidente Vladimir Putin, el martes, según el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov.
Si bien el anuncio de Estados Unidos hace temer un retorno a la proliferación nuclear, Peskov también afirmó Rusia “nunca atacará a nadie primero”.
Lavrov también dijo que estaba “esperando una aclaración de la posición oficial” . “Si John Bolton está listo para hacerlo, evaluaremos la situación”, dijo en conferencia de prensa.
John Bolton es conocido por sus duras posiciones en política exterior. Adalid en el pasado para provocar una caída del régimen iraní, fue parte de los que más abogaron por “ salir del acuerdo iraní ” firmado en 2015 por varias potencias con Teherán para evitar que desarrollara el arma nuclear.
Nombrado en marzo de 2018, Bolton nunca escondió su convicción de que Washington debe atacar militarmente a Corea del Norte en vez de negociar con el régimen, también defiende sanciones más amplias contra Rusia, acusada por Washington de intentar perturbar el proceso electoral estadounidense.
“Crear atmósfera de confianza”
El consejero de Trump inició su estadía en Moscú con un encuentro con Nikolai Patrushev, jefe del Consejo de Seguridad Nacional ruso, que duró “unas 5 horas” , dijo un portavoz de este órgano, Evgueni Anochin.
En la reunión, que tuvo lugar “en una atmósfera constructiva”, ambos líderes “presentaron una serie de iniciativas destinadas a crear una atmósfera de confianza y fortalecer la cooperación entre Rusia y Estados Unidos”, afirmó el Consejo de Seguridad en un comunicado.
Por su lado, la parte rusa insistió en la “importancia de preservar” el tratado INF, subrayando que su “ruptura sería un golpe para todo el sistema internacional de no proliferación”, según la misma fuente.
Según el diario británico The Guardian, Bolton habría presionado a Trump para que anuncie el retiro del tratado INF. También estaría bloqueando toda negociación sobre la extensión del tratado New Start sobre misiles estratégicos, que expira en 2021.
El tratado INF fue firmado en 1987 por el último dirigente de la URSS, Mijaíl Gorbachov, y el presidente estadounidense de entonces, Ronald Reagan.
El gobierno de Trump se queja del despliegue por parte de Moscú del sistema de misiles 9M729, cuyo alcance, según Estados Unidos, supera los 500 km, violando así el texto del INF.
El tratado INF, que suprime el uso de toda una serie de misiles de entre 500 y 5.000 km de alcance, había puesto término a la crisis desatada en los años 1980 por el despliegue de los SS-20 soviéticos con ojivas nucleares en Europa oriental, y misiles estadounidenses Pershing en Europa occidental.
De concretarse, la retirada sería “el segundo golpe más grave a todo el sistema de estabilidad mundial”, afirmó un senador ruso, Alexéi Pushkov. El primero fue la retirada de Estados Unidos en 2001 del tratado ABM sobre misiles antibalísticos.
Algunos observadores apuntan a que la medida estadounidense podría estar motivada por una presunta amenaza china. Pekín no forma parte del acuerdo INF, por lo que puede desarrollar sin trabas armas nucleares de alcance intermedio.
Pekín dijo el lunes que Estados Unidos debería “pensarlo dos veces” antes de decidir y subrayó que era “completamente equivocado hablar de China al evocar la retirada del tratado” , dijo la portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores chino, Hua Chunying.
“Una retirada unilateral tendrá múltiples efectos negativos”, añadió destacando que el tratado tuvo un papel importante en el proceso de desarme y en mantener un equilibrio estratégico global.