El tiempo estimado de entrega de Menú Express es de unos 30 minutos. Los repartidores salen de la oficina, ubicada en el norte de Quito. Foto: Víctor Muñoz / EL COMERCIO
La entrega a domicilio de comida a través de aplicaciones móviles (‘apps’) cobra fuerza en el mercado ecuatoriano.
Hace nueve años, antes de la llegada de la tecnología móvil, Menú Express incursionó en la entrega de comida a domicilio en Quito. “Decidimos brindar servicios de delivery a los restaurantes de alta gama que no contaban con esta opción”, señaló Andrés Ontaneda, gerente general de la empresa.
El negocio arrancó con pedidos a través de llamadas, luego se lo podía hacer también desde un sitio web y, ahora, mediante una ‘app’, que está disponible desde enero del 2016.
Con esta nueva tecnología la empresa se acercó a un público joven, de entre 20 y 30 años.
Menú Express brinda el servicio de entregas con personal propio. Cuenta con una flota de 30 motorizados. Trabaja con negocios que no tienen el equipo para brindar el servicio de entrega y con restaurantes que sí lo tienen, pero necesitan apoyo para no saturar su flota, explicó Ontaneda.
Las ‘apps’ también ayudan a canalizar los pedidos de forma digital y los restaurantes atienden la entrega. Este es uno de los servicios de Domicilios.com, que nació como un emprendimiento nacional en el 2014, pero en enero de este año fue adquirido por Domicilios.com Colombia.
La firma local trabaja con unos 700 establecimientos de comida en Quito (incluidos los valles de Los Chillos y Cumbayá), Guayaquil y Cuenca. “Para el 60% de esos restaurantes, la aplicación es solo un canal de ventas y para el resto es un mecanismo de apoyo para las entregas a domicilio”, dijo Andrea Sandoval, gerenta de marketing. El crecimiento mensual del servicio es del 20%.
En este año, las extranjeras Glovo y Uber Eats ingresaron al mercado ecuatoriano.
La primera hace entregas de todo tipo de insumos, “pero los servicios de comida representan el 85% de las entregas”, señaló Gianfranco Baquero, gerente de Ventas y Mercadeo.
Uber Eats trabaja con más de 400 negocios de comida en Quito y Guayaquil.
El modelo de negocio de estas dos últimas aplicaciones consiste en afiliar a restaurantes y reclutar repartidores que trabajan de manera independiente. Por lo general son estudiantes, amas de casa o jubilados que buscan un trabajo independiente o generar ingresos adicionales.
La condición es que tengan un vehículo, moto o bicicleta para brindar el servicio. “Como socio de entrega, aquellos con autos de dos puertas o vehículos más antiguos pueden ahora generar ingresos flexibles con Uber Eats”, señaló Cristina Villarreal, gerenta de comunicación de Uber Eats para Latinoamérica.
‘Apps’ dejan más ingresos a los restaurantes
La cadena guayaquileña la Parrilla del Ñato usa la aplicación Domicilios.com desde mayo de este año. La herramienta le permite ahorrar costos en la gestión de los pedidos a domicilio, ya que implementar un software propio es costoso, comentó el gerente comercial, Luis Escobar.
Los cinco locales de la Parrilla del Ñato realizan un promedio de 40 entregas por día. Los pedidos a través de la ‘app’ representan el 16% de las ventas mensuales, dijo Escobar.
Otros negocios pequeños también han notado los beneficios de la tecnología. El local de carne a la parrilla Twins, de Quito, usa dos aplicaciones.
La que le ha resultado más efectiva es Glovo. El local aún no aparece en el listado de restaurantes de la aplicación, pero los clientes llaman al establecimiento para hacer el pedido y solicitan los servicios de Glovo, para que un repartidor retire la comida. Un 20% de la facturación mensual de este negocio se explica por pedidos a través de las ‘apps’.
Según datos de la Cámara de Comercio Electrónico, solo las transacciones de comida rápida, que incluye restaurantes que usan ‘apps’ y otras tecnologías, creció 3% el último año.
La facturación de las firmas de servicios de entrega de comida (que incluye transporte de ‘catering’), también creció en los últimos cuatro años, según datos del Servicio de Rentas Internas (SRI) (ver gráfico).
Algunas empresas tienen un precio base de USD 1,50 por cada entrega y el monto se incrementa según la distancia. Otras como Uber Eats tienen una tarifa única de 2,25. Estos costos los paga el cliente. El tiempo de entrega ofrecido es de entre 20 y 40 minutos.
Paúl Bravo usa aplicaciones para pedir comida los viernes. “Con mis amigos del trabajo siempre buscamos nuevos restaurantes y, por el tiempo, preferimos que nos traigan la comida a la oficina”.