Los adultos mayores rescatan la identidad tsáchila a través de leyendas, cuentos y juegos ancestrales. Foto: María Victoria Espinosa / EL COMERCIO
Los historiadores orales de la nacionalidad tsáchila hacen esfuerzos para preservar las tradiciones ancestrales. Ellos visten la indumentaria típica y relatan a los niños y jóvenes las leyendas de sus antepasados.
El historiador y exgobernador tsáchila Manuel Calazacón asegura que pese a los intentos por preservar la identidad, esta se está perdiendo. Las nuevas generaciones han dejado las comunas por buscar oportunidades de trabajo y estudio en la ciudad.
Por eso el Instituto Nacional de Patrimonio y Cultura (INPC) visitó hace 15 días siete comunas tsáchilas. Los técnicos hicieron un estudio sobre la historia de la comunidad. La información que recaudaron con los líderes e historiadores de las comunas servirá para un proyecto que busca resguardar el patrimonio histórico de la nacionalidad, radicada en Santo Domingo.
Según la Dirección Provincial de Cultura y Patrimonio, el proyecto está en la fase inicial (diagnóstico). En la segunda fase, los tsáchilas deberán decidir la manifestación social y cultural que desean resguardar; esta puede ser de carácter histórico o también musical, gastronómico, artesanal, saberes ancestrales, leyendas…
De acuerdo con esa decisión se realizará un documento bibliográfico o audiovisual, que será entregado a la comunidad. Según el gobernador tsáchila Javier Aguavil, la nacionalidad tiene solo 10 libros en los que se relata la historia tsáchila. Pero no toda la información es precisa o está completa. “Nuestra historia se ha contado oralmente y suponemos que se ha tergiversado porque los historiadores no han preparado a otras personas para que sigan contándola”.
Agustín Calazacón recibió a los técnicos del INPC en su vivero llamado Uni Shu (piedra sagrada en tsa’fiki). Él les habló de la importancia de preservar las plantas nativas y los saberes medicinales ancestrales. “Mi proyecto es repoblar el bosque de Chigüilpe con 72 tipos de plantas medicinales. Si se resguardaran las propiedades de las plantas, la medicina ancestral tendría futuro”.
Para Augusto Calazacón, en cambio, se debe resguardar la historia de los líderes de la nacionalidad como Bruno, Alejandro y Abraham Calazacón que fueron los primeros gobernadores tsáchilas y que además consiguieron la legalización de tierras.
La próxima semana, se tiene previsto que el INPC presente un informe sobre la información que se recaudó en las comunas. Con ese documento se iniciará un trabajo con los tsáchilas para decidir las pautas del proyecto.