Una de las principales limitaciones de los vehículos eléctricos es la escasez de estaciones de recarga.
Por esta razón la compañía Honda invierte esfuerzos en el diseño de estaciones carga solares y de hidrógeno. Una de ellas fue probada a principios de diciembre. El propósito es facilitar la transición desde combustibles fósiles a alternativos.
El nuevo programa será probado en Japón, y la compañía ya dijo que la meta es llegar a lo que llaman gestión total de energía.
El sistema consiste en tres componentes: la unidad de carga, un dispositivo para separar el agua en hidrógeno y oxígeno y paneles solares de seis kilovatios que brindará la energía que utilizará el sistema. Uno de los aspectos más interesantes es que el proceso de recarga, que en teoría se podría realizar en muchos puntos de la ciudad, toma solo cinco minutos.
Honda tiene planificado desarrollar más pruebas en diferentes ciudades japonesas.
El programa comenzará en las ciudades japonesas de Saitama, Kumagaya y Chichibu, con el objetivo de lograr la gestión de la energía total.
Incluyendo vehículos eléctricos, vehículos eléctricos híbridos, los scooter eléctricos EV-neo y el Monpal ML200 cuatro ruedas eléctricas. El programa también pondrá a prueba la viabilidad de un vehículo eléctrico alimentado por una estación de carga de energía solar de uso público.
En la actualidad, hay varias empresas que invierten recursos en el desarrollo de este tipo de estaciones. Por ejemplo, la empresa estadounidense Hire Electric construyó en Washington la mayor estación de recarga de vehículos eléctricos apoyada por paneles fotovoltaicos.
La potencia instalada de los paneles alcanza los 126 kilovatios, y podrá satisfacer la demanda de carga de hasta 12 tomas de corriente. Son las llamadas fotolineras. La iniciativa esta avalada por General Motors, que colabora en el desarrollo de una infraestructura similar en Estados Unidos.
El principal objetivo de muchas empresas de la industria automotriz es reducir las emisiones generadas al usar el auto eléctrico.