130 637 nuevos inscritos en el sistema ciclo 2017- 2018

En el Colegio Isaac Newton, decenas de padres acudieron, la semana pasada, para matricular a sus hijos. Foto: Diego Pallero/ EL COMERCIO.

En el Colegio Isaac Newton, decenas de padres acudieron, la semana pasada, para matricular a sus hijos. Foto: Diego Pallero/ EL COMERCIO.

En el Colegio Isaac Newton, decenas de padres acudieron, la semana pasada, para matricular a sus hijos. Foto: Diego Pallero/ EL COMERCIO.

Al enterarse de que su hija perdió el año, Irina Torres (nombre protegido) sintió un fuerte dolor en el corazón. Luego se enojó.
Como castigo, le exigió a la adolescente, de 14 años, que trabajara la última semana de vacaciones, antes del inicio de clases en la Sierra y Amazonía, el próximo 4 de septiembre.

La joven debía rendir exámenes remediales en cinco materias en un colegio público de Quito. Durante las vacaciones, sus padres contrataron un profesor para que se igualara en lo que le faltaba aprender, pero finalmente perdió el año.

Según el Ministerio de Educación, quienes rindieron remediales y no pasaron en una sola materia pueden dar el examen de gracia. Pero quienes no superaron las pruebas en más de una materia no tienen opciones; pierden el año lectivo.

Si un alumno no pasa de año, no se le puede negar el cupo. La normativa establece que el estudiante puede tener hasta una segunda matrícula en la misma institución. En el caso de una tercera matrícula, el caso se define en el Distrito.

130 637 nuevos inscritos en el sistema público se han registrado hasta el 22 de agosto de 2017, en el régimen Sierra- Amazonía, según la Cartera.

En el Colegio 24 de Mayo, que tiene 4 000 estudiantes, se publicarán los resultados de los exámenes remediales, hoy lunes 28 de agosto de 2017. Su rectora, Nelly Miño, contó que el examen de gracia será mañana. La mayoría de estudiantes que se quedaron al remedial tuvo dificultades con las materias abstractas, como matemáticas.

En la Unidad Educativa Municipal Eugenio Espejo, el martes y miércoles (29 y 30 de agosto de 2017) se tomarán los exámenes de gracia, la última opción para no perder el año.

Su rector, Pedro Coloma, contó que en el período lectivo 2016-2017, ni el 2% de sus alumnos perdió el año. Contó que trabajan con el sistema de quimestres desde antes  que lo implantara el Ministerio de Educación.

“Los chicos que no pasan el año tienen problemas familiares, algunos padres dicen que sus hijos no les obedecen, suele pasar con los de noveno y décimo año. También ocurre que no alcanzan el conocimiento requerido”, sostiene.

El rector del Colegio Manuela Cañizares, William Rosero, cuenta que se quedaron a rendir los exámenes de gracia unos 120 estudiantes. La mayoría en química y matemática.

Ese establecimiento acogerá el próximo año a unos 4 500 alumnos entre nuevos y antiguos. El funcionario espera que se terminen los exámenes de gracia para solo concentrarse en las actividades del año 2017-2018.

En medio de ese trajín, hay estudiantes que sienten incertidumbre, porque aún no aprueban el ciclo. Wilson Argudo (nombre protegido), de 15 años, tenía que dar tres remediales la semana pasada en un establecimiento público.

Matemática, inglés y ciencias sociales son las materias en las que rindió las evaluaciones, pero reprobó en dos de ellas. Ante eso, la tarde del viernes pasado, su madre acudió al colegio para pedir a los profesores que lo ayudaran.

El compañero de Wilson, Mateo Cabezas (nombre protegido), de 16, se presentó a los remediales de física, matemáticas, inglés, biología, filosofía e historia. Cuenta que sus padres no lo reprendieron por quedarse a remediales.

Tampoco se enojarán con él si pierde el año. Prefieren que se iguale en lo que le faltó aprender el año pasado, en vez de que apruebe sin una base sólida de conocimientos. Reconoce que durante el año prefirió divertirse con sus amigos y se descuidó.
“Me siento mal. Mis padres se sacrifican por mí y no saqué buenas notas”.

Édgar Reyna es un psicólogo que trabaja con alumnos que tienen problemas de bajo rendimiento académico.

Asegura que, en esos casos, lo primordial es que la familia los apoye con motivación y seguridad. En ese sentido, los padres deben estar presentes en los momentos que los chicos rinden los exámenes remediales o de gracia. También que hablen con los maestros.

Con ello -precisa el profesional- los chicos sentirán que sus familiares se preocupan por ellos y no están abandonados.

A su juicio, lo peor es agredirlos o insultarlos. “Lo más recomendable es cambiarle de colegio para evitar los ambientes negativos y depresiones”. Si es que el alumno no pasa de ciclo, los padres deben apoyarle y decirle que puede salir adelante. “El mundo no se acaba por quedarse de año”.

En esta última semana de agosto, la actividad es más intensa en los planteles. A los procesos académicos pendientes del año lectivo anterior, se suma la visita de padres a los centros de estudio para matricular a sus hijos.

Por ejemplo, el Colegio Isaac Newton ha cumplido una intensa agenda este mes. 46 chicos de segundo y 80 de tercero de Bachillerato Internacional iniciaron las clases 15 días antes; además, se cumple el período de matrículas para los distintos niveles. Otros padres acuden para consultar quiénes serán los profesores, qué material didáctico se requerirá, etc.