Científicos y ecologistas han expresado sus puntos a favor y en contra de la investigación con este tipo de materiales. Foto: Archivo
La publicación de la Ley de agrobiodiversidad, semillas y fomento de la agricultura sustentable ha despertado el debate sobre los alimentos transgénicos en Ecuador.
En su artículo 56, el documento señala que “se permite el ingreso de semillas y cultivos transgénicos al territorio nacional, únicamente para ser utilizados con fines investigativos”.
Tras su publicación, científicos y ecologistas han expresado sus puntos a favor y en contra de la investigación con este tipo de materiales. Para unos, abre la brecha hacia alimentos que puedan mermar la diversidad agrícola del país; para otros, con esta decisión se da paso para el desarrollo de semillas y productos más resistentes a plagas y otras adversidades.
Desde inicios de siglo, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) ha analizado el avance de estos cultivos. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), este tipo de semillas podría ayudar en casos de poblaciones con alergias a ciertos componentes de las plantas, o bien a mejorar la eficiencia de los sistemas de producción alimentarios.
Del otro lado, organizaciones como Greenpeace y Acción Ecológica apuestan por una agroecología que asegure la soberanía alimentaria de las naciones. Para ellos, el desarrollo de estos cultivos es una amenaza en cuanto convierte al campesino en alguien dependiente de semillas.
Producción:
A favor
Alimentos con precios asequibles para muchos
En un artículo para la revista Forbes, Michael Stebbins, del Consejo para la Información de Biotecnología de EE.UU., expresa que, a pesar de las fluctuaciones, los cultivos transgénicos mantienen bajos los precios de ciertos productos debido a que su producción es más eficiente.
Neutro
Un futuro alimentario, con regulación internacional
La FAO advierte que los transgénicos pueden ayudar a combatir la hambruna, siempre y cuando se establezcan procesos de investigación adecuados. Al 2014, 30 países ya producían cultivos transgénicos tanto para la investigación como para la comercialización local o internacional.
En contra
Reducción de la diversidad de cultivos locales
Una de las principales críticas de organizaciones como Acción Ecológica es que los cultivos transgénicos son un peligro para la agrobiodiversidad. Esto implica que los cultivos nativos van desapareciendo progresivamente, a causa de una ampliación en el mercado de un solo tipo de semillas.
Salud:
A favor
Alimentos que tienen mayor número de nutrientes
Un año atrás, 124 premios Nobel firmaron un documento en contra de Greenpeace por impedir la distribución de maíz dorado, enriquecido con vitamina A. Para los científicos, este tipo de alimentos aseguran la ingesta de nutrientes en lugares con problemas de desnutrición.
Neutro
Los productos requieren de estudios sobre su impacto
En su página de preguntas y respuestas sobre alimentos genéticamente modificados, la OMS menciona que estos serán la comida del futuro. Sin embargo, ellos instan a que se analicen con mayor detenimiento las consecuencias de ciertos genes vegetales en organismos humanos.
En contra
Las investigaciones todavía son insuficientes
Al hablar sobre el impacto de los transgénicos, Greenpeace España expresa que “potencialmente pueden suponer nuevas alergias, aparición de nuevos tóxicos, disminución en la capacidad de fertilidad”, entre otros. Ellos instan por investigaciones independientes de los gobiernos.
Economía:
A favor
Cultivos más rentables y a menor costo de producción
El agroeconomista Graham Brookes, de PG Economics Ltd., señala que la biotecnología generó 122 millones de toneladas extras de soya, y otras 6,6 millones más de canola, en un período comprendido entre 1996 y 2002. Asimismo, se redujo el uso de pesticidas y combustibles.
Neutro
Se debe evaluar el costo-beneficio de los productos
En su ensayo ‘Economía de los alimentos genéticamente modificados’, publicado por la Universidad de Stanford, el ecólogo Mark Hammer señala que en la comercialización de productos transgénicos se debe considerar que estos no pueden alterar los ciclos económicos agrícolas locales.
En contra
Determinar el uso real de ‘semillas terminator’
Desde finales de los noventa, Greenpeace y Ecologistas en Acción han alertado sobre el costo que tendría el uso de ‘semillas suicidas’ por pequeños agricultores. Este tipo de semillas germinarían una sola vez y sus descendientes serían infértiles, obligando a la compra de nuevos tipos de estas.
Ambiente:
A favor
Una agricultura con menor huella ecológica
De acuerdo con Escuela de Ciencias de la Vida de la Universidad del Estado de Arizona, un beneficio del uso de semillas transgénicas es que estas desarrollan plantas que requieren menos agua y pesticidas para crecer, con lo cual disminuye su huella ecológica.
Neutro
Los cultivos requieren de una regulación especial
Una preocupación de la FAO es que los cultivos transgénicos puedan cambiar los usos del suelo en ecosistemas sensibles. Por ello, solicitan que los gobiernos identifiquen claramente los espacios de cultivo para que en esas áreas no afecten al ambiente.
En contra
Impacto sobre la fauna que se alimenta de estas plantas
La organización Green Facts expresa que los cultivos transgénicos no solo afectan a los humanos sino también a la fauna. Ellos encuentran que los animales que se alimentan con estos productos desarrollan cierta resistencia a pesticidas, por ejemplo.