Hoy, 23 de enero del 2014, los miembros del Colegio de Médicos de Tungurahua mantuvieron una reunión en el hospital del Instituto de Seguridad Social, IESS, de la ciudad andina de Ambato.
En la cita se declararon en solidaridad con sus compañeros del hospital Pablo Arturo Suárez, de Quito. Además, según Guillermo Bastidas, presidente del gremio, los médicos de la casa de salud ambateña (120 aproximadamente) también renunciaron.
Las dimisiones se dan después de que el presidente Rafael Correa no vetó el cuerpo legal y no eliminó el tercer inciso del artículo 146 sobre el homicidio culposo por mala práctica profesional.
Bastidas anunció que en el momento (08:40) se reúnen con los galenos del hospital Regional de Ambato para tomar una decisión. “En la provincia somos 900 médicos pero, 300 trabajan en sector público“, acotó Bastidas.
El directorio médico de Tungurahua decidió, también, convocar a una asamblea provincial prevista para el martes 28 de enero del 2014. Asimismo se mantendrán reuniones con los galenos que se desenvuelven en el área privada para adoptar una posición general.
De acuerdo con Bastidas el nuevo Código Integral Penal es estigmatizador y criminaliza el ejercicio de los profesionales de la salud.
Por otro lado, en un comunicado remitido esta mañana, el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social informó que su Hospital en Ambato, el mismo que cuenta con 397 médicos, paramédicos y personal administrativo, está laborando normalmente. Según la versión oficial, todos sus asegurados son atendidos de acuerdo a las citas programadas para el día de hoy, con el médico general o especialista que los está tratando.
“Al momento se han atendido 115 emergencias en el nosocomio de Ambato-IESS; los servicios hospitalización, consulta externa y quirófano no han registrado ningún inconveniente”, dice el comunicado.
Luego se asegura: “Por lo tanto, la atención es absolutamente normal tanto en Ambato como en todo el país, en donde el IESS mantiene unidades médicas”.