Francisco Pinoargotti, durante una de sus presentaciones. Foto: Enrique Pesantes / EL COMERCIO
La idea es que en un mismo espacio la gente encuentre una amplia oferta cultural con acento en las artes escénicas. El comediante Francisco Pinoargotti, que dirige la nueva sala Las Tablas de La Bota, comparó el modelo con las salas de cine, donde el espectador llega y escoge el género, el horario y el título que desea.
La Bota, el nuevo complejo cultural del Malecón del Salado en Guayaquil, ofrece tres nuevas salas especializadas en microteatro, comedia de pie (‘stand up comedy’) y teatro de formato convencional. Aunque este lugar también cuenta con dos espacios más, la explanada y la terraza, zonas planeadas para conciertos y espectáculos de danza.
El artista Pinoargotti pondrá en escena, todos los jueves de este mes, una rutina crítica-cómica sobre los guayaquileños. “Chupan por todo, chupan a las cinco de la tarde porque ganó su candidato y vuelven a chupar a las ocho porque perdió su candidato”, dijo ante las carcajadas de más del centenar de personas que asistieron al show inaugural.
Los días viernes, la sala intercala funciones de ‘stand up’ con comediantes invitados y conciertos acústicos, los primeros con Pancho Terán y Mike Albornoz. El Microteatro Guayaquil, la iniciativa de Jaime Tamariz que cobró éxito en las habitaciones de una vieja casona en la ciudadela Miraflores, se muda al Salado.
El complejo de La Bota cuenta, además, con seis pequeñas salas para 20 espectadores cada una.“El nuevo espacio, sin escaleras y mayores comodidades, ofrece al público más oportunidades para ver la obra que quiere”, indicó el director del Teatro.
En el mes inaugural, el Microteatro tiene en cartelera con obras como ‘Harry y Sally’, donde los actores Alejandra Paredes y Juan José Jaramillo dan cuenta de su familiaridad y soltura con el formato breve, en una comedia romántica inspirada en la película de los 80 ‘When Harry met Sally…’.
La pieza, de 25 minutos, cuenta tres encuentros en 10 años de una relación de amistad que tiende al romance y al cinismo, lo que arranca las risas y carcajadas de los espectadores. El guión fue adaptado por Adelaida Jaramillo con la dirección del propio Tamariz.
Tras tres años de dirigir el Microteatro GYE, Tamariz se lanza a participar por primera vez en una de las obras, ‘Pedro y el Capitán’, una adaptación de un texto de Mario Benedetti sobre una ‘dura’ sesión de tortura. Actúa junto a Juan Fernando Franco.
Además, el Microteatro ofrece variedad de géneros, desde un texto clásico como ‘Pedida de mano’, de Antón Chéjov hasta una puesta experimental del cuento ‘Un hombre muerto a puntapiés’, con la que el actor español Aarón Navia conmemora el 70º aniversario del fallecimiento del escritor ecuatoriano Pablo Palacio.
El tercer espacio cerrado corresponde al de la sala de teatro La Bota, administrada por la Fundación Malecón 2000, que impulsa el proyecto junto al Municipio de Guayaquil. Con capacidad para 116 personas, el salón cuenta con plataformas retráctiles, que permiten adaptar el espacio en función de los requerimientos de las obras, o desacoplar completamente los graderíos para exhibir muestras de arte como fotografía o pintura.
En su mes inaugural, la sala presenta -todos los jueves de junio- el espectáculo de danza ‘La historia del tango’. Además, los domingos en la mañana habrá funciones de títeres y en la tarde, teatro familiar. Este mes, por ejemplo, se presentará la obra ‘Dorothy en la tierra de Oz’.
Adicionalmente, en la terraza y en la explanada, que están al aire libre, se llevarán a cabo conciertos, exposiciones,
exhibiciones de cine y mercados, explicó María Luisa Barrios, vocera de Malecón 2000.
El área peatonal cuenta con mesas y zonas de descanso con vista a la fuente de aguas danzantes del estero, y en la plataforma superior funcionan dos bares con variedad de bebidas.