Joaquín Cardiel, Enrique Bunbury, Juan Valdivia y Pedro Andreu en el 2007. Foto: Netflix
El grupo español Héroes del Silencio se separó hace 25 años y, para conmemorarlo, el cineasta Alexis Morante presentó un documental que, tras ser exhibido en streaming, ha causado polémica, aunque también nostalgia y algo de desazón, pues queda claro que los músicos no planean tocar juntos nunca más.
‘Héroes: Silencio y Rock & Roll’ muestra el auge y caída de un cuarteto que causó furor cuando eso que se llamaba rock latino, que en realidad era pop/rock en castellano, triunfaba en España y América Latina. Porque Hombres G y Soda Stereo, por nombrar a algunos, no eran rock, eran roqueros vampirizados por el pop.
Héroes del Silencio también caería en la zona del pop (presentaciones de TV con playback, homenajes por parte de la monarquía a la que habían criticado, presión por vender…), pero el grupo comenzó a resquebrajarse cuando el cantante y compositor Enrique Bunbury exigía experimentar con instrumentos diferentes a los del rock e incorporar nuevos sonidos , lo cual enfadó al guitarrista Juan Valdivia. Y esa pugna, sazonada con el cansancio de las giras y el uso de las drogas, acabó con el grupo.
El documental, con un riquísimo apoyo de archivo, muestra los inicios de Héroes del Silencio en su terruño de Zaragoza. Cuenta las limitaciones que experimentaban por ser de provincia, el rechazo de las disqueras y los esfuerzos que los músicos hacían para lograr ser contratados y grabar, pero dentro de su sonido.
El filme muestra lo que todos sabemos, como la suerte de toparse con Gustavo Montesano, integrante del grupo de pop Olé Olé, quien se decidió a presentarlos a EMI y logró el reto que lo cambió todo: Si Héroes del Silencio lograba vender 5 000 copias de un single, se los contrataría. Pues se vendieron 35 000 copias de Héroes de Leyenda, la canción que dio inicio al contrato y a también a la gloria.
Doce años después, el grupo se separó tras grabar cuatro álbumes y vender 25 millones de copias en su país pero también en Europa Occidental y América Latina.
El documental también muestra lo que todos intuíamos o no sabíamos del todo, como lo que pasaba por la cabeza de sus componentes. Cuenta con testimonios de los cuatro integrantes de la formación clásica: Enrique Bunbury (voz y guitarra rítmica), Juan Valdivia (guitarra líder), Joaquín Cardiel (bajo) y Pedro Andreu (batería), además de Alan Boguslavsky, guitarrista mexicano-estadounidense que la integró entre 1993 y 1996.
También constan confesiones de testigos, amigos y empleados de esta aventura que, tras su colapso en 1996, solo tuvo una chispa en el 2007, cuando el grupo hizo una gira formal de despedida, sin álbum nuevo. Seguramente faltó ‘La chispa adecuada’.