El solista iba a participar el 11 de septiembre en el anfiteatro Cocomarola como parte del encuentro Taragüí Rock, pero la organización del evento decidió separarlo del cartel. Foto: Facebook / Gustavo Cordera
Las recientes declaraciones de Gustavo Cordera, exvocalista de la banda argentina Bersuit Vergarabat, llegaron más lejos de lo que él habría imaginado. Una charla con estudiantes de Periodismo, cuyo acuerdo era que nada de lo dicho fuera publicado, se convirtió en la pesadilla de este cantante y en el momento más incómodo de su carrera.
Sus polémicas declaraciones, que salieron a la luz el pasado miércoles, hicieron alusión al sexo y a la violación. Uno de los estudiantes de la escuela TEA Arte, que formaba parte de esta charla que tiene como propósito simular una rueda de prensa a modo de práctica, publicó las declaraciones en su cuenta de Facebook y, a los pocos minutos, ya era una noticia viral.
“Es una aberración de la ley que si una pendeja de 16 años con la c… caliente quiera c… con vos, vos no te las puedas c… Hay mujeres que necesitan ser violadas para tener sexo porque son histéricas y sienten culpa por no poder tener sexo libremente”, fueron las palabras de Cordera, de acuerdo con la publicación de Jonatan Dalinger, el alumno de TEA que rompió el ‘off the record’.
¿Cuáles son las consecuencias? La desaparición de un músico que ha sonado por años. Ese fue el castigo aplicado en contra de Cordera, pues algunas emisoras argentinas prohibieron la difusión de su música y los festivales en los que iba a participar este año le dieron de baja. Esa es la primera polémica que gira alrededor de las declaraciones del ex Bersuit.
De acuerdo con el músico y productor musical cuencano Renato Zamora, esta decisión forma parte de una “limpieza” de la imagen pública que pueda tener una emisora o un festival de música. “Al ser una figura pública, con todos los seguidores que tiene y, además, al haber hecho tan fuertes declaraciones, entiendo que los medios no quieran formar parte del escándalo. Es una cuestión de acción y reacción”.
El solista iba a participar el 11 de septiembre en el anfiteatro Cocomarola como parte del encuentro Taragüí Rock. La organización del encuentro anunció a través de su cuenta en Twitter que, ante las fuertes palabras del músico, ha quedado fuera del cartel.
Sus participaciones en Mendoza y en Corrientes también fueron canceladas. Por su parte, la emisora FM Rock & Pop, mayor difusora de estos géneros en Argentina, emitió un comunicado oficial en el que anunció que la música de Cordera quedará fuera de su programación en apoyo a la campaña ‘Ni una menos’ y como muestra de repudio contra las declaraciones del solista.
¿Artista magnífico, horrible persona? Es un dilema sobre el cual se ha escrito mucho. De hecho, recientemente fue abordado por el escritor español José Ovejero, quien en ‘Escritores delincuentes’ recoge las historias de algunos autores que son mucho más curiosos por sus secretos oscuros que por lo que han escrito. No es, precisamente, el caso de Cordera. Ovejero muestra cómo al ser condenados por asesinato o por haber cometido algún delito, su obra es inmediatamente juzgada con parámetros extraartísticos; es el caso de Cordera, cuya música ha quedado silenciada a causa de este escándalo relacionando directamente a la obra con la persona.
Las cuestiones morales ya han enterrado la parte artística de artistas polémicos o definitivamente indeseables en otras ocasiones, pese a que sus actos privados no corresponden a la arena cultural. Como escribió Baudelaire: “la literatura y las artes deben perseguir un objetivo diferente al de la moral”. Hace algunos años, en Francia se generó un gran debate acerca de la conmemoración del escritor Louis-Ferdinand Céline, que ha sido considerado como “un gran escritor, pero un horrible ser humano”. Antisemita y polémico, el autor finalmente quedó fuera de los personajes que recibirían el homenaje, pues algunos judíos residentes en Francia encontraron eso como una ofensa.
En el mundo del cine es Roman Polanski el mayor ejemplo, pues, después de haber quedado marcado por el brutal asesinato de su esposa, Sharon Tate, se metió en tantos problemas que tuvo que huir y esconderse en Polonia. Este reconocido director también quedó sesgado y fue repudiado por sus actos que fueron considerados estupro, por haber mantenido relaciones con una menor de edad, supuestamente aprovechándose de su poder como cineasta y de la vulnerabilidad de ella como joven actriz.
Pero de vuelta al caso Cordera, ¿por qué se publicó la charla con los estudiantes? Esa es la segunda polémica: los alumnos de TEA hacen este tipo de simulacros cada año, con el objetivo de practicar cómo será su vida como periodistas. Pero uno de los acuerdos establecidos es que, sin importar lo que suceda, esas charlas no pueden ser publicadas.
Jonatan Dalinger anunció en su cuenta de Facebook lo sucedido, aunque la política de TEA, conocida por sus estudiantes, indica que eso no es permitido. Acerca de este tema ni la institución educativa ni el alumno han hablado.
“Lo lógico sería entender el contexto de las cosas. Saber por qué Cordera dijo eso y de qué manera. De otra forma, se recibe una información sesgada”, dice Zamora. El solista se defendió alegando que, al tener conocimiento de que era una charla de práctica en la que se debía generar debate, usó esas palabras para que se generara la discusión.
“Me encontré con algunas personas muy tensas y susceptibles acerca del tema abuso y no se molestaron en escuchar y profundizar acerca de algo tan delicado… Tal vez el lenguaje que utilicé fue demasiado ordinario como a veces me caracteriza, pero también veo a gente sedienta de condenar cuando en ese momento frente a frente se ha quedado en silencio. Por eso les pido que si quieren saber lo que pienso de verdad mirémonos frente a frente y denme la oportunidad de expresarme libremente. Ahora todo está fuera de contexto como es costumbre y los que ya me odiaban podrán descargar su ira con impunidad”, fue la respuesta de Cordera a través de un comunicado.
Pero al parecer es tarde. Cordera es algo así como músico más odiado del rock en Argentina, el que ha sido tachado a lo largo de los años como controversial y problemático. Ahora salen a la luz todos los actos repudiables que Cordera ha cometido a lo largo de su vida. Un excolega hasta dijo que “se podría escribir un libro con todas las miserias de este tipo. En el ambiente del rock, casi nadie lo quiere”.
Las confesiones empezaron a llegar de todos sus examigos y excompañeros: cuando robó unos instrumentos musicales del estudio de Charly García y luego se jactaba de haber cometido el delito, o cuando rompió la confianza de Andrés Calamaro contando secretos suyos acerca de temas íntimos que conocía porque eran buenos amigos.
Organizaciones de mujeres y fundaciones civiles dijeron que tomarían acciones legales ante las declaraciones del cantante, por los cargos de Apología del delito e Intimidación pública. Ante todo el escándalo que se originó por este tema, Cordera ya ha dicho que se siente avergonzado, ofreció disculpas y continúa alegando que lo que dijo no debió ser publicado.