Entrevista a Guillermo Arriaga, Premio Alfaguara de Novela 2020. Foto: Europa Press.
La literatura de Guillermo Arriaga (Ciudad de México, 1958) tiene como impronta la escritura de narraciones polifónicas y fragmentadas así como la presencia de personajes que siempre están al borde del abismo, en medio de mundos caóticos.
Estas huellas literarias están presentes en sus guiones cinematográficos: Amores perros, 21 gramos o Babel y en novelas como ‘Escuadrón guillotina’, ‘Un dulce olor a muerte’, ‘El búfalo de la noche’ y ‘El Salvaje’.
Marcas literarias que también están presentes en ‘Salvar el fuego’, la novela con la que, hace unos días, ganó el Premio Alfaguara 2020 y por el que recibirá USD 175 000 y una escultura de Martín Chirino.
El jurado del Premio Alfaguara dijo que ‘Salvar el fuego’ es una novela polifónica, que narra con intensidad y excepcional dinamismo una historia de violencia donde el amor y la redención aún son posibles. ¿Cree que el amor filial, fraternal y romántico puede funcionar como posibilidad real para que la sociedad mexicana se redima de la violencia en la que vive o solo es una quimera literaria?
No creo que el amor sea suficiente para detener la espiral de violencia en que nos vemos sumidos. Creo que el amor permite un tejido social sano, pero para ello es necesario implementar antes medidas que abatan la injusta distribución de la riqueza, la falta de oportunidades, la vergonzosa corrupción y la aún más vergonzosa impunidad.
¿La violencia siempre ha estado presente en su escritura, ¿encuentra algo de sublime en ella?
No encuentro nada de sublime en la violencia. Al contrario, creo que debemos evitar sublimarla. Quienes hemos sufrido de violencia, sabemos que es terrible. En todo caso, lo que quisiera es que mi obra invitara a una reflexión sobre la violencia y cómo contenerla.
Desde los griegos el amor y la muerte se convirtieron en los dos grandes temas universales que atraviesan la historia de la literatura, ¿se le ocurre un tercer tema o más bien cree que hay que pensar en nuevas posibilidades de volver sobre estos dos motivos?
Faulkner habla de cuatro grandes temas: poder, odio, amor y muerte. Sigo pensando que esos son los grandes temas y casi todas las historias giran alrededor de ello. Podría incluir la búsqueda de la belleza como un tema menor, pero tema al fin y al cabo.
¿Cómo se vence lo imposible en su novela, de dónde proviene la fuerza para que los personajes puedan seguir adelante?
Admiro a las personas, y por tanto a los personajes, que mantienen dentro de sí un tanque de fortaleza, una energía imparable que ni siquiera las circunstancias más adversas los detienen. Quizás esta obsesión devenga de mis padres, que aún en momentos críticos de salud, han pensado en proyectos y en salir adelante. Todavía una semana antes de su muerte, por un cáncer agresivísimo, mi padre estaba haciendo planes, deseoso de hacer un largo viaje y escribir otro libro.
Además de escribir novelas y cuentos, usted es reconocido por escribir guiones cinematográficos, ¿cree que en algún momento un guionista o un escritor de cómics podrían ser considerados como candidato o ganador del Premio Cervantes o del Nobel de Literatura?
Me rehúso a la utilización de la palabra “guionista”. Quienes escribimos cine creamos una obra, no solo una “pequeña guía” (guión) para que otro sea quien realmente haga la obra. Si queremos pensar en un ganador del Cervantes o del Nobel para un escritor de cine, debemos empezar por reconocer su calidad de “autor”, tal y como sucede en el teatro. Así, la dramaturgia cinematográfica encontrará su punto alto y podrá ser considerada.
¿Por qué cree que en la actualidad los lectores se sienten tan atraídos por las historias marcadas por la autobiografía y el famoso “basado en hechos reales”?
Creo que vivimos en una sociedad en que las clases medias y altas, que son quienes mayoritariamente leen, viven vidas muy organizadas. El que otros hayan tenido vidas con aventura y riesgo, debe llamar la atención.