El romance de Pausini con el público hispano comenzó a mediados de la década de los noventa con Soledad, un tema que se volvió el himno de las personas con el corazón roto de la época. Foto: Patricio Terán / EL COMERCIO
El homenaje al ‘Divo de Juárez’ sucedió a la mitad del concierto que la artista italiana ofreció este domingo 28 de agosto de 2016, en Quito. Durante su primera presentación en el país, en sus 23 años de carrera artística, Pausini dedicó unos minutos para hablar de su entrañable amistad con Juan Gabriel, a quién dedicó En cambio no, una canción escrita para su abuela.
Eso fue uno de los momentos más emotivos de un concierto que duró dos horas y media y en el cuál Pausini demostró porque es la artista italiana más querida en Hispanoamérica, durante las últimas tres décadas.
El romance de Pausini con el público hispano comenzó a mediados de la década de los noventa con Soledad, un tema que se volvió el himno de las personas con el corazón roto de la época. El pasado domingo 28 de agosto, esta canción fue interpretada en compañía de Camila, una guayaquileña de 20 años -gran parte de los asistentes a este concierto llegaron de esta ciudad- que no desentonó al momento de hacer el dúo con la italiana.
Durante el concierto Pausini demostró el porqué de su éxito en el mercado de la música latinoamericana. En esta presentación bailó salsa, improvisó pasos de flamenco y cantó Y mi banda toca el rock, uno de los éxitos de Menudo.
Las imágenes del concierto
Foto: Patricio Terán / EL COMERCIO
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A más de dejar claro su gustó por los ritmos de la región en este concierto, que fue parte de Similares Us and Latam Tour 2016, Pausini demostró que tiene una voz potente salpicada con tonalidades propias de una soprano. Eso más su indiscutible carisma -interactuó con el público en varias ocasiones- hicieron que su repertorio musical quedara corto.
A canciones como Similares o Enamorada que forman parte de su nuevo disco, presentado en el 2015, se sumaron clásicos como Amores extraños, Volveré junto a ti, Entre tú y mil mares y Víveme, que interpretó junto a Johan Vera, el artista ecuatoriano que fue su telonero y que conoció, hace unos meses, en el reality La Banda.
Pausini no se cansó de entrar y salir del escenario siempre con un vestido nuevo. Uso un blanco enterizo cuando se sentó al piano a interpretar dos canciones dedicadas a Paula, su hija a quién logró concebir luego de años de espera. Al final el vestido negro con el que interpretó sus últimas canciones quedó ocultó por un poncho de lana plomo.
Así y ataviada con un gorro con los colores de la bandera de Ecuador canto, a capela y con las luces encendidas, Escucha a tu corazón. El final perfecto para los asistentes a un concierto que Pausini dedicó a los fallecidos por el terremoto del 16 de abril en Ecuador y a los del terremoto de Italia, de la semana pasada.