Kayla Unbehaun, una adolescente estadounidense de 15 años, desapareció en julio de 2017 en Carolina del Norte, a unos 965 km del domicilio de su padre en Illinois.
Este caso llamó la atención de las autoridades aunque no se dio con el paradero ni los responsables. En un momento se considero que un secuestro parental llevado a cabo por su madre, que tenía derechos de visita pero no la custodia completa.
El día en el que Kayla desapareció, su madre, Heather Unbehaun, dijo que iban a acampar, pero nunca regresaron. Cuando el padre, Ryan Iserka, fue a recoger a la niña al día siguiente en South Elgin, en Chicago, no consiguió encontrarla.
A partir de ese momento, la familia emprendió una búsqueda que no han paralizado en todos estos años.
Búsqueda por seis años
La niña desapareció cuando tenía nueve años de edad, su padre y madre organizaron campañas en redes sociales para obtener la máxima ayuda posible para poder encontrarla.
Esta desaparición apareció en la última temporada de Misterios sin resolver, la serie de Netflix que relata “casos reales de desapariciones desconcertantes, asesinatos impactantes y encuentros paranormales”, tal y como la describe la plataforma.
Tras ver el documental, un hombre reconoció a Kayla Unbehaun en una tienda en Carolina del Norte y totalmente convencido de que era la niña desaparecida de la que hablaban en ese capítulo del documental, llamó a la Policía, que acudió al lugar de inmediato.
Después de llevar a cabo diferentes investigaciones, se confirmó que el hombre que denunciaba estaba en lo cierto: se trataba de Kayla.
Madre fue arrestada
La madre fue arrestada ese mismo día y la ya adolescente fue entregada a su padre. Aunque no se conoce más detalles del caso, se cree que una la progenitora era la responsable. El padre pidió privacidad.
Más noticias
Visita nuestros portales: