El hormigón luce su tono natural en paredes, pisos y mobiliario integrado en el interior. Foto: Cortesía Daniel Moreno Flores
A raíz de la pandemia, las prácticas más sostenibles como la optimización de recursos y la preferencia de materiales locales y naturales se acentúan y son la base de muchos proyectos en todo el mundo.
Que los materiales luzcan tal cual son en la naturaleza y que sus características propias sean el verdadero aporte estético y funcional en los espacios es un concepto que crece en una variedad de programas.
Ahora, las características esenciales de cada material y producto, en sí mismos, están siendo aprovechadas al máximo para construir espacios expresivos, en los cuales el elemento constructivo es más un protagonista y menos un recurso invisible.
Además del atractivo estético, el uso de materiales en sus formas crudas puede representar un ahorro de recursos en un edificio, al prescindir de los recubrimientos y tratamientos adicionales.
Los arquitectos Daniel Moreno Flores y Marie Combette explican que cada material tiene sus características, las cuales representan la riqueza y la calidad de la obra. Resaltan que es importante entender a los materiales, para sacar el mejor provecho posible y emplearlos de forma adecuada.
En ese sentido, los elementos naturales que se pueden obtener de la localidad son los ideales, si se busca alcanzar un enfoque sustentable.
Entre estos se destacan la madera y las fibras como el bambú, la totora, el carrizo y otros recursos como el tapial y el adobe. También hay materiales que permiten la posibilidad de quedar a la vista, como el ladrillo, el hormigón y el metal. Si bien estos ya tienen procesos de fabricación e industrialización, poseen características marcadas que aportan carácter al espacio.
Por ejemplo, el concreto es uno de los recursos que más se ve en las construcciones. Este se viene aplicando desde los años 50; y hoy no solo sirve para soportar las estructuras, sino para ser usado en los interiores. Su textura áspera y color natural de roca da un aspecto fuerte a los espacios.
La madera es otra protagonista. Con sus vetas y colores naturales no está únicamente en vigas, columnas y pisos, sino en detalles de lámparas, ventanas, puertas y más.
El arquitecto Moreno sostiene que estos materiales incluso adquieren características valiosas con el paso del tiempo, como ciertos cambios en las tonalidades, en la textura y hasta en la forma.
El metal oxidado puede ser un claro ejemplo. Luce en ciertos revestimientos o piezas en muebles. Hoy en día, con la tecnología en cuanto a tratamientos y productos, se pueden conservar las propiedades
del material y a la vez tratarlo para conseguir durabilidad.