La presencia de las ruinas en el arte y sus distintas interpretaciones desde el siglo XVIII hasta la actualidad se recogen en una muestra inaugurada en el museo Tate Britain de Londres. La exposición ‘Ruin Lust’ (Ansia de ruinas) recoge la fascinación por las ruinas, curiosos objetos de deseo que seducen con su decadencia y destrucción.
El gusto popular por las ruinas que conquistó a artistas, escritores y arquitectos en el siglo XVIII se muestra en un primer salón de la exposición, decorado con obras de los pintores ingleses J.M.W. Turner (1775-1851) y John Constable (1776-1837), que “convirtieron a Gran Bretaña en paisajes pintorescos en ruinas”.
Entre los artistas contemporáneos destaca Eduardo Paolozzi, descendiente de italianos y que presenta en Londres la cabeza del David de Miguel Ángel resquebrajada y con los pedazos unidos con cuerdas.
Los escombros que dejaron la Primera y Segunda Guerra Mundial en Londres también están aquí recogidos, con las fotografías de Paul Nash de fragmentos de arquitectura surrealista de 1930 y 1940.