Primero fue el sueño de un joven director de orquesta con la intención de establecer un sistema educativo-musical para niños y jóvenes. Luego, una entidad protegida por el Estado ecuatoriano (bajo Decreto Ejecutivo No. 3276 del 14 de noviembre del 2002). Ahora es una institución que debe buscar sus propios recursos económicos (tras haber sido derogado dicho decreto) para así ayudar a cerca de 1 300 personas que se benefician de susproyectos como orquestas infanto-juveniles, de docentes y diversos coros.
Desde 1995, la Fundación Orquesta Sinfónica Juvenil del Ecuador (Fosje), dirigida por el maestro Patricio Aizaga, trabaja en pro de la educación musical de cientos de jóvenes. Actividad que en la actualidad se dificulta, según Aizaga, una vez que el Estado no le asigna un presupuesto desde agosto de este año. Esta decisión la ha llevado a vivir su peor crisis económica en 17 años de existencia.
Para sobrellevar esta crisis, la Fosje ofrece hoy (20:00, Casa de la Música, calle Valderrama y av. Mariana de Jesús) el primero de una serie de conciertos cuyo único propósito es reunir fondos para sus proyectos. Este cuenta con la participación de invitados como Consuelo Vargas y Los Reales, Christian Hidrobo y Juan Fernando Velasco. Junto a ellos, la agrupación interpreta piezas del repertorio nacional e internacional.
Aizaga comenta que la intención es “visibilizar el talento de los miembros de las orquestas infantil, juvenil y de los docentes y así contar con elapoyo económico de quienes nos escuchan”. Una de sus preocupaciones es que, al igual que ya sucedió meses atrás con el núcleo de la fundación en Guayaquil, en Quito las actividades tengan que cesar por falta de dinero.
Al ser un programa educativo que cuenta con el respaldo de la Fundación Musical Simón Bolívar, creada por el venezolano José Antonio Abreu, desde enero próximo, según anuncia Aizaga, la agrupación contará con la presencia de la primera de varias misiones educativas que llegarán de Venezuela.