Borbón impulsa la difusión de su cultura

La fiesta que dio inicio a la parroquialización se realizó en el malecón de Borbón.

La fiesta que dio inicio a la parroquialización se realizó en el malecón de Borbón.

La fiesta que dio inicio a la parroquialización se realizó en el malecón de Borbón. Foto: Cortesía Gobierno Parroquial de Borbón

Con danzas típicas del pueblo afro y cantos de arrulladoras, Borbón festejó el miércoles sus 80 años de creación. Esta parroquia del cantón Eloy Alfaro, en el norte de Esmeradas, ha sido reconocida por ser poseedora de una gran riqueza cultural, que apunta a la conservación de las tradiciones a través del folclor.

Para el antropólogo Xavier Vera, la parroquialización permitió revisar el patrimonio intangible (danza, música, instrumentos y canto) del pueblo afro y de otras etnias que se asientan en este territorio, como son los chachis y éperas.

Guillermo Ayoví -también conocido como Papá Roncón-, se ha convertido en un referente para los nuevos marimberos de la parroquia y de toda la provincia. Nativo de Borbón, este artista fue parte de las celebraciones de su poblado natal.

Según el artista y dirigente de su propia escuela de danza y música afro, la parroquialización sirvió para poner en evidencia lo más destacado de la cultura de su pueblo.

Pero también, agregó Ayoví, fue una oportunidad para analizar algunas necesidades de Borbón -especialmente en el ámbito cultural-, como el funcionamiento de una nueva escuela de música y danza.

Carlos Obando, presidente del Comité de Desarrollo de Borbón, explicó que algunas de las principales muestras de difusión de la cultura local han sido el Festival de la Catanga de Oro y la Merienda de Negros. Obando contó que ambos programas se han realizado desde hace varios años con el fin de difundir la destreza artística de su gente.

En ambas celebraciones se han mostrado tradiciones antiguas como el uso de candiles de caña guadúa y hasta la preparación del tapa’o de nanaó (pescado seco), servido en mate y acompañado de agua endulzada con panela.

En ese territorio, los pobladores más ancianos han conservado la costumbre de contar cuentos, hablar de los personajes míticos (Tunda, Gualgura, Riviel). Y hay mujeres que han practicado la medicina ancestral con plantas que cultivan en sus azoteas.

Los sobadores también han conservado su actividad, a través de curaciones para las dolencias leves o para curar el “espanto y mal aire”, con la ayuda de plantas y oraciones.

Marina Valencia es una de las cantoras, que a más de ser experta en ese arte, aprendió sobre los poderes curativos de las plantas. Sus conocimientos sobre este tema los aprendió de sus padres.

“Tenemos deseos de conservar nuestra cultura, pero no siempre encontramos todo el apoyo para desarrollarla”, dijo Valencia, que desde hace 30 años ha organizado la fiesta a la Virgen del Carmen.

Las actividades culturales de Borbón se han desarrollado en comunidades como Bella Aurora, El Capricho, La Comuna, La Peñita, Santa Rosa de los Épera, Punta de Piedra, El Reposo, Wenceslao, El Tope, El Chorro, La Concordia, San Francisco del Cayapa y Lomas del Cayapas.

A más de lo artístico y tradicional, los productores de Borbón se han sumado a los esfuerzos por dar a conocer lo que se cosecha en la parroquia, dentro y fuera de ella.

En Borbón, las poblaciones afroesmeraldeñas se dedican principalmente al cultivo de cacao, palma africana, papaya, coco y cítricos.

Un grupo de productores de coco, por ejemplo, elaboró una cocada con miel de caña de azúcar que se vende en Esmeraldas y en otras ciudades. Asimismo, están las 30emprendedoras del sector El Capricho, que se reunieron para producir cocadas que se expenden en el centro de Borbón.

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