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Calles verdes y espacios urbanos amigables para los peatones, una propuesta para la capital

El proyecto tiene previsto iniciarse en el bulevar de las Naciones Unidas, norte de Quito

El proyecto tiene previsto iniciarse en el bulevar de las Naciones Unidas, norte de Quito

El proyecto tiene previsto iniciarse en el bulevar de las Naciones Unidas, norte de Quito. Foto: Archivo / EL COMERCIO

Lograr que la ciudad sea un espacio seguro, más amigable con el peatón y alineado a una lógica de sustentabilidad, es el objetivo del proyecto Piloto Aceras Accesibles Plan Árbol (AAPA) que promueve el Colegio de Arquitectos de Pichincha (CAE-P) en conjunto con el gobierno local y organizaciones de la sociedad civil.

Replantear los espacios públicos e incluso las viviendas y locales de comercio es una de las reflexiones que toma fuerza en medio de la pandemia por el covid-19. La necesidad de conseguir espacios más cómodos, versátiles y flexibles siempre ha sido uno de los ejes en el diseño urbano y arquitectónico, sin embargo, en este contexto, se vuelve una prioridad.

AAPA es un proyecto particular del CAE-P que nació hace dos años, pero que con la pandemia ha ganado más pertinencia, sostiene Pablo Moreira, presidente de la entidad.

El Plan Árbol fue una propuesta presentada en la anterior administración municipal que consistía en la siembra de árboles urbanos en diferentes sectores de la ciudad, sin embargo, no fue acogida por el Municipio.

Eso se suma a otra iniciativa de la institución que efectúa desde el 2012. Se trata del ‘parking day’, una celebración anual que consiste en transformar de forma temporal los parqueados en espacios verdes o estancias para los ciudadanos. La confluencia de estas propuestas da lugar a AAPA.

Segú el CAE-P, este proyecto responde a la necesidad de propuestas para el desarrollo urbano sostenible. Está sustentado en estos principios: la calle como espacio público por naturaleza, seguridad vial, caminabilidad, conectividad, accesibilidad a medios de movilidad, accesibilidad universal y paisaje urbano.

Aceras más amplias y espacios verdes comunitarios en el hipercentro

El proyecto piloto comprende tres fases y se efectuará en un polígono de 30 kilómetros, que comprende las avenidas Naciones Unidas, Amazonas, Atahualpa y 10 de Agosto. Según Pamela Mendieta, arquitecta miembro del Directorio del Colegio de Arquitectos de Pichincha, la primera fase consiste en aplicar un urbanismo táctico, es decir, transformar el espacio para que sean adecuados para transitar. Para ello, se plantea una ampliación de veredas, cambiar a un solo sentido las calles y colocar árboles en la calzada.

En una segunda fase se propone transformar la calle Ignacio San María, considerada la calle central del polígono, en un bulevar diferente, ya que será un área con vegetación y en donde los ciudadanos podrán permanecer y disfrutar. Una tercera fase consiste en generar un eje peatonal vivo, calles abiertas a los ciudadanos y al comercio.

Espacios recuperados, barrios amigables y sustentables

La idea es replicar este piloto en otros barrios de la ciudad. En este sentido, el Colegio de Arquitectos firmó un convenio con la Secretaría de Territorio, Hábitat y Vivienda y la Secretaría de Movilidad del Municipio del Distrito Metropolitano de Quito, para la promoción de Proyectos Barriales de Desarrollo Urbano Sostenible.

Por otro lado, el AAPA también comprende recuperar zonas baldías. Según Mendieta, estos sitios que no están en uso se vuelven puntos peligrosos. En estas zonas se busca la participación comunitaria. La propuesta es generar espacios con conciencia ambiental enfocados, por ejemplo, en actividades de compostaje, huertos urbanos y reciclaje.

Para Moreira, lo que quiere demostrar el proyecto es que se puede lograr una ciudad más sostenible, donde el espacio público sea más agradable para transitar y que para eso se debe diseñar de forma apropiada.

Se tiene previsto que en septiembre arranque la primera fase del piloto. Indicó que todo dependerá de los recursos para continuar con cada fase del proyecto.