Dice que vive sola y rompe a llorar. Tras ese arrebato de sensibilidad, respira y agrega: “Tengo 77 años, yo misma hago mis cosas y cuido a los animales… Mis cuatro hijos se fueron a la ciudad”. Habla María Paredes, una de las 52 personas que se resiste a dejar su comunidad de toda la vida.
Las autoridades comenzaron este martes (5 de febrero del 2019) a repoblar las aguas del suroeste de Florida con unos 16 000 peces adultos y alevines con el fin de restaurar el hábitat dañado por la tóxica marea roja que acabó en 2018 con la vida de miles de animales marinos.