La edad dorada del liberalismo económico se extendió en Occidente desde el despegue de la Revolución Industrial hasta fines del siglo XIX. Eran tiempos de "laissez faire" en que emprendimientos y mercados se desarrollaron casi sin intervención de los gobiernos y los resultados económicos se dejaban al azar. Durante este tiempo, rudimentarias economías feudales se transformaron en complejas economías capitalistas y generaron una riqueza material hasta entonces desconocida.