Expertos australianos intentan crear un "superkoala", que no contraiga algunas enfermedades que los están matando y tenga una mayor diversidad genética, mediante el apareamiento de sementales de la zona continental con hembras que sobrevivieron a los incendios forestales de la isla Canguro.
Plantar semillas de árboles con drones en Australia, cuyos bosques fueron calcinados por los devastadores incendios forestales de 2019-20, es parte de un plan piloto que está a punto de comenzar para restaurar los hábitat de los koalas y salvarlo de la extinción.
Unos 61 000 koalas fueron víctimas de los incendios forestales ocurridos en Australia durante el llamado Verano Negro, según un informe publicado este lunes, 7 de noviembre del 2020, sobre el impacto de esta catástrofe en la fauna del país oceánico, caracterizada por sus especies únicas en el planeta.
Los científicos han resuelto un antiguo misterio sobre el comportamiento de los koalas: cómo estos marsupiales trepadores nativos de Australia consumen el agua necesaria para vivir.
Las autoridades australianas abrieron este lunes 3 de febrero de 2020 una investigación para determinar las responsabilidades por la muerte de al menos 40 koalas a raíz de la tala de una plantación del estado suroriental de Victoria.
Un conmovedor video muestra a la mascota de una familia compartiendo su plato de agua con un sediento koala. Las imágenes se han vuelto virales en medio de noticias que confirman que al menos 1 000 millones de animales, entre ellos miles de koalas, han muerto en los incendios forestales de Australia causados por las altas temperaturas.
Decenas de koalas heridos en los incendios que devastan el sureste de Australia, llegan a diario al improvisado hospital de animales, en el parque natural de la isla Canguro, en el sur del país, muchos de ellos aferrados al cuello de sus cuidadores.
Cuando la voluntaria Sarah Price encontró un bebé canguro asustado pero milagrosamente vivo en la bolsa de su madre moribunda en medio de los incendios forestales que devastan el sudeste de Australia desde septiembre, le pareció oportuno llamarlo Suerte. Así son las historias que retratan el proceso de recuperación de canguros y koalas que se recuperan de las llamas en Australia
Cuando la voluntaria Sarah Price encontró un bebé canguro asustado pero milagrosamente vivo en la bolsa de su madre moribunda en medio de los incendios forestales que devastan el sudeste de Australia desde septiembre, le pareció oportuno llamarlo Suerte.
Devastación y cerca de 500 millones de animales muertos. Esos son los daños que han dejado hasta este 9 de enero del 2020 los incendios mortales que azotan a Australia desde septiembre del 2019. Las llamas también han resquebrajado un tercio de la tierra en la Isla Canguro, un refugio australiano donde habita fauna nativa, como leones marinos, koalas y diversas especies de aves. La NASA logró capturar imágenes satelitales del antes y el después de la zona que da cuenta del desastre causado por el fuego. Las instantáneas fueron difundidas el 7 de enero del 2020.
La imagen es demoledora y esperanzadora al mismo tiempo. En un lienzo blanco -matizado con amarillo y morados sutiles-, los rostros tristes de koalas, reptiles, canguros y aves miran de frente. Representan a los más de 430 millones de animales fallecidos durante los devastadores incendios que azotan a Australia desde septiembre del 2019. Pero no están solos.
Los incendios forestales que arrasan Australia desde septiembre del 2019 han desgarrado la población de la vida salvaje: más de 480 millones de animales, entre ellos canguros y koalas, ha muerto víctimas de las llamas o por falta de alimentos y refugio. Pero hay halos de luz entre la tragedia, llamados Bear (Oso en español) y Taylor, dos canes rescatistas del Fondo Internacional para el Bienestar Animal (IFAW, por sus siglas en inglés) que han logrado rescatar a decenas de animales de los árboles de eucalipto incinerados.
Kaylen Ward es una modelo estadounidense que decidió gestionar recursos para ayudar a los koalas afectados por los incendios forestales en Australia. Y lo hizo de una manera peculiar. La mujer ofreció enviar una foto en la que aparece desnuda a todo aquel que haga una donación de al menos 10 dólares australianos (unos USD 6,93) a organizaciones benéficas.
Una docena de koalas fue rescatada de los incendios forestales que asolan Sídney, dijeron los conservacionistas este martes 17 de diciembre del 2019, mientras devastadoras llamas invaden cada vez más el hábitat crítico de estos animales.
Los incendios forestales que arden en el este de Australia desde principios de noviembre mataron a más de 2 000 koalas, una especie ya clasificada como "vulnerable", indicaron a EFE este lunes 9 de diciembre del 2019 fuentes académicas.
El koala, uno de los animales más emblemáticas de Australia y del mundo, podría estar desapareciendo del planeta aceleradamente. La alerta la dio la ONG Australian Koala Foundation este año y la situación parece empeorar con los incendios que afectan en estos momentos al país.
85 incendios forestales han resquebrajado la vida de la ciudadanía que habita Nueva Gales del Sur, el estado más poblado de Australia: tres personas fallecieron y más de 100 resultaron heridas. Pero también hay animales que perdieron su vida a causa del fuego incontrolable que azota a la nación desde el viernes 8 de noviembre del 2019.
Los koalas, unos marsupiales endémicos de Australia, desaparecen a un ritmo más rápido que la media de la población mundial de animales, informó este martes 30 de octubre del 2018 el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF).
Un nuevo estudio publicado este jueves 13 de septiembre del 2018, en Australia, encontró poblaciones de koalas genéticamente diversas a lo largo del país, lo que abre la puerta a una gestión con enfoque geográfico que permita proteger a esta especie de la extinción.
La explotación cada vez mayor de la naturaleza para fines agrícolas podría llevar a la extinción de los koalas en 2050 en el estado australiano de Nueva Gales del Sur, según las conclusiones de un informe presentado este viernes 7 de septiembre de 2018 por la organización medioambiental WWF.