Carlos Arboleda quería su revancha en la capital. Hace seis años que no jugaba en Quito (antes militó en Liga) y Aucas le dio la oportunidad. Cuando la dirigencia oriental lo llamó para contarle el proyecto, no lo dudó. Se contactó con su empresario y de inmediato buscaron cerrar el acuerdo.
El exvolante ofensivo del Macará, Carlos Arboleda, pidió disculpas a la dirigencia y a la afición celeste. El mediocampista señaló que el presidente del club ambateño, Miller Salazar, pensaba en hacer dinero para él mismo y no para los jugadores.