Alex Aguinaga estuvo a punto de no ser parte de la Selección Ecuatoriana en la Eliminatoria rumbo a Corea y Japón 2002. Las diferencias con la prensa deportiva y directivos lo llevaron a renunciar a la ‘Tricolor’, pero la oportuna intervención de Hernán Darío Gómez y el apoyo de su esposa lo motivaron a reconsiderar su decisión.