La Ministra de Finanzas regresa de la reunión del Fondo Monetario Internacional (FMI) con un mensaje claro: reformar la normativa para calcular el endeudamiento público.
Durante su estadía en Washington, el FMI publicó las cifras de deuda pública de Ecuador. Estas muestran una diferencia respecto a las que maneja el Gobierno, el cual utiliza una metodología heredada del Régimen anterior, pero que ha sido defendida por la actual Ministra de Finanzas.
Para el FMI, el cálculo de la deuda pública en Ecuador se basa en estándares no convencionales. Esta afirmación dejó sin piso el discurso oficial, que había sostenido que las cifras sobre el endeudamiento público seguían la metodología del FMI.
Según el FMI, a finales del 2016 el peso de la deuda pública respecto al Producto Interno Bruto (PIB) alcanzó el 42,8%, pero el Gobierno lo estableció en 27,2%.
La subestimación de las cifras se hizo a través del Decreto Ejecutivo 1218, que le permitió al Régimen anterior seguir contratando nuevos créditos pese a que el Código de Planificación y Finanzas Públicas pone un límite del 40% a la relación deuda /PIB.
Lo anterior ya fue observado por la Contraloría del Estado, que incluso estableció indicios de responsabilidad administrativa y penal por este tipo de prácticas.
Con estos antecedentes, el Gobierno necesita reformar con urgencia la normativa sobre la deuda pública y enviar un plan de sostenibilidad fiscal a la Asamblea Nacional.
Mientras no se supere la limitación legal, es poco probable que un funcionario firme un papel para contrata nueva deuda, más cuando los miembros del anterior Comité de Deuda y Financiamiento Público están en la picota.
El Gobierno sabe que necesita arreglar este tema rápidamente porque debe contratar nueva deuda en los próximos días para dar liquidez a la caja fiscal. Y para eso tiene dos opciones: el mercado de bonos y los multilaterales. Pero en ambos casos, primero deberá reformar la normativa sobre la deuda.