El Diccionario de la Lengua Española, entre varios significados de “tufo”, señala “hedor”, motivación de “soberbia o vanidad”. A la tinterillada, la define como “embuste”. Las más perniciosas tinterilladas son las que se presentan como normas legales y reglamentarias, actuando en su formación y/ o en su ejecución quienes están “investidos” de autoridad. El derecho, para alcanzar legitimidad, debe sujetarse a sus fines y razón de ser: la justicia, la equidad, el orden en libertad, la razón, entre otros. Igual, las actuaciones de las personas “investidas” de autoridad pública. Lo contrario, será solo expresión de un poder totalitario, fascista o con otro membrete, cuales son los casos que menciono a continuación.
El de la Universidad Andina Simón Bolívar, de régimen jurídico propio, desde su fundación y funcionamiento de la sede en Quito. La norma bajo cuyo amparo se estableció es explícita: “La Universidad Andina Simón Bolívar, sede Ecuador, es una universidad pública que realiza actividad académica de posgrado y funciona en el país de acuerdo con el ordenamiento jurídico de la Comunidad Andina, su estatuto y los convenios celebrados con la República del Ecuador. Su estatuto será aprobado y reformado por los organismos que establecen sus normas propias”. Similar normativa rige para la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso). No puede alegarse norma alguna posterior, peor una mera disposición transitoria con dedicatoria para las universidades ecuatorianas, a fin de impedir que sean rectores sus titulados, supuesto que fraguan titulaciones, para castigar a una Universidad que nada tiene que envidiar a excelentes universidades de otros países y regiones. Sería inconcebible pensar que en Oxford, Harvard u en otra universidad que se respete, se establezca que sus títulos no sirvan para ejercer cargos directivos.
A la Universidad Andina se la quiere castigar porque tiene en Enrique Ayala Mora a un rector que honra a la academia ecuatoriana. Cree y practica el respeto a la comunidad universitaria de maestros, cursantes o estudiantes y trabajadores; y, que solo en libertad y dignidad puede haber universidad. El nuevo rector, César Montaño, surge desde la misma comunidad, en comunión con los principios que la sustentan.
Otro caso es el de Radio Democracia, con Gonzalo y Álvaro Rosero. A Gonzalo lo conozco por décadas, a Álvaro desde su edad escolar. Gonzalo es un comunicador inquebrantable en el derecho a expresarse, respeta todos los pensamientos y todas las opiniones. Fundó la Radio en 1984, año en que llegó a la Presidencia el Ing. Febres Cordero y se le cerraron las puertas de medios temerosos del poder. Tinterillada y falsedad, con tufo adicional de castigo, aquello que se invoca para intentar silenciarlo.