La “democracia” tendría un tumor, que estaría alojado en Bélgica y en la Asamblea. El desesperado objetivo sería “borrar” las huellas incriminatorias, resguardarse con amnistías, indultos, anulación de sentencias, etc.; en definitiva, impunidad, venganza y, por supuesto tomarse las esferas de poder. Estando el presidente Lasso en la mira, ¿qué opciones tendría?
¿Acceder a la impunidad a cambio de apoyo político que le permita mantenerse, lo cual sería un grave error. ¿Resistir inmovilizado y confiar de una embestida final que dé paso a Borrero, a quien también, si no accede, lo atacarían? ¿La muerte cruzada, que sería quizás su última carta? Detrás de esta pudiera existir una astuta provocación del correísmo, ya que anticiparía la posibilidad de volver a Carondelet.
¿La Consulta Popular – plebiscito? La participación del soberano en asuntos de alto interés público, sería utilizada como una suerte de legítima defensa democrática de Lasso. Ante la feroz arremetida política, abre la posibilidad de sostenerse, en base a una inteligente campaña de comunicación y profunda explicación del por qué de la Consulta.
¿Cuáles pudieran ser algunas de las preguntas sujetas al control previo de constitucionalidad por parte de la CC? Por ejemplo: ¿está de acuerdo que, entre en vigencia la Constitución de 1998?; ¿está de acuerdo que, los asambleístas sean elegidos en segunda vuelta, y por ende se proceda con la reforma constitucional, de ser el caso? ¿Está de acuerdo que, por esta ocasión, se anticipen las elecciones de asambleístas a fin de generar gobernabilidad y estabilidad?
La ingobernabilidad va mas allá de instituciones y constituciones, ya que se origina en el pobre carácter de algunos políticos irresponsables, carentes de principios y amor por el país; reflejo de una sociedad débil, que infortunadamente aún cree y/o añora los cantos de sirena correístas. En todo caso, la defensa democrática debe accionarse con prontitud, con determinación, dignidad y Honor.