Cuando se llevaron a cabo las elecciones presidenciales y de asambleístas en el 2021, la distribución de la Asamblea Nacional notoriamente la ubicaba en la centroizquierda. Esto, en virtud de que UNES (36%), Pachacutik (20%) y la ID (13%), todos ellos siendo agrupaciones de esa tendencia, concentraban el 69% de la Asamblea. Más allá de estar a favor o en contra de esta línea de pensamiento, lo real era eso, que las preferencias ciudadanas iban por esa vía.
Para todos es ya bien conocido el “culebrón” político que resultó de esa elección en el 2021, y que nos llevó nuevamente a las urnas al cabo de solo 2 años. Ahora bien, si combinamos que la alineación del pensamiento del actual Gobierno iba más bien por la derecha y que luego de semejante descalabro político, el desgaste integral de su administración es brutal, no era sorprendente que alguien pudiera elucubrar que en estas recientes elecciones la centroizquierda iba a estar de vuelta y a lo grande.
Sin embargo, los resultados obtenidos de las elecciones del 20 de agosto pasado muestran cosas diferentes. En esta ocasión, en el ala del centro hacia la izquierda encontramos a agrupaciones como: ADN, RC, Claro que se Puede, RETO y AMIGO. Estos, individualmente poseen el 10%, 38%, 2%, 1% y 1%, respectivamente; concentrado en total el 52% de la actual Asamblea Nacional. El resto de las agrupaciones se encuentran desde el centro, inclusive, hacia la derecha.
Viendo ambos números, 2021 y 2023, resulta evidente que, aun cuando la agrupación asociada al expresidente Rafael Correa Delgado aumenta en su posición relativa dentro de la Asamblea, la centroizquierda en conjunto aglutina menos curules en términos porcentuales. Lo que dos años atrás era un 69%, ahora es un 52%.
Definitivamente, este es un resultado contrario a las expectativas que muchos pudieron haberse formulado al momento de la muerte cruzada. Y esto solo nos puede llevar a la conclusión de que en entornos tan exacerbados como el que hemos vivido recientemente, siempre habrá gente dispuesta a reconsiderar sus preferencias iniciales.