El análisis geopolítico representa un recurso básico para la determinación de la política exterior del Estado especialmente en materia de seguridad. Su razonamiento sobre las rivalidades del poder político en los espacios territoriales no debe circunscribirse únicamente a las relaciones entre estados que se preocupan por la protección de derechos, integridad e intereses de la población, para asegurar su supervivencia en un ambiente de unidad y soberanía nacional.
El poder político legal y legítimo, concerniente a la autoridad gubernamental, a las funciones del Estado a los partidos políticos, instituciones y organizaciones sociales se encuentra amenazado por diferentes estructuras de poder de grupos organizados y armados que se disputan el control de espacios territoriales y buscan el dominio, para lograr en unos casos la implementación de agendas políticas de beneficio social, agregadas o simplemente buscan beneficios lucrativos, valiéndose de la infiltración en la economía.
Siendo ilegales, enfrentan y usurpan el monopolio de uso de la fuerza que es de exclusividad del Estado, creando de zonas grises en las que la inestabilidad política, violencia y criminalidad es atentatoria a la integridad de las personas y comunidades que demandan protección del Estado para una sobrevivencia digna en un estado libre de amenazas.
Estas amenazas son las que mejor se han beneficiado de la mundialización, porque para sus actividades no existen límites territoriales de los estados, son en la actualidad difusas, por la fácil mimetización con la población.
Estas amenazas no se enfrentan a las FF.AA. y al Estado para su destrucción, las hostilizan debilitan y se mantienen por debajo de una guerra declarada, por dos razones. Por una parte según Jhon Holloway, el objetivo de revolución en la actualidad no está en la toma del poder por las armas, sino con acciones políticas en contra de la sociedad capitalista, que en la práctica se ha visto como la “Unidad latinoamericana para defender los procesos revolucionarios”. Por otra parte actúan en coordinación con agentes estatales valiéndose de la corrupción.
En Colombia las amenazas son híbridas y mutantes porque además de las FARC en proceso de paz, existen grupos disidentes, el ELN, los Grupos armados organizados GAO, Paramilitares como el Clan Úsuga y los grupos del narcotráfico y de la minería ilegal.
En México por otra parte la disputa es por el territorio. Quince carteles del narcotráfico operan en más del 60% de los estados, lográndose imponer en el país, el cartel del Pacífico o Sinaloa, cartel Jalisco Nueva generación CJNG.
La geopolítica no predice el futuro, orienta la acción política y la capacidad de prevención y respuesta que se formule en la política exterior del país para una mejor orientación de la estrategia de seguridad nacional.