En el extenso guión presidencial del programa de televisión con el periodista Gestoso, se comenzó invalidando los datos estadísticos sobre la inseguridad, aunque hayan sido difundidos por el Ministerio Coordinador de Seguridad.
Decir que no hay estadísticas confiables para medir la inseguridad es una gran verdad, que se evidencia porque los observatorios de seguridad, utilizan diferentes metodologías que no son compatibles aunque sean técnicamente procesados como el del Municipio de Quito y de la Politécnica del Litoral; pero que no permiten obtener una estadística nacional. Peor aún cuando se crea otro observatorio a nivel de gobernaciones, como el de Guayaquil más caracterizado por la confrontación política, que por la unificación metodológica para medir la seguridad.
Argumentar que la solución de este problema de falta de estadísticas, se dará con la participación del INEC, acusa un profundo desconocimiento de la naturaleza y funciones de un observatorio de seguridad ciudadana.
Al INEC no le corresponde esta función; no es suficiente concentrar la información ni tampoco obtenerla únicamente con encuestas sociales, socio demográficas y de opinión acerca de la percepción de la inseguridad. Esta información es importante, pero los verdaderos datos ‘duros’, se los obtiene mediante la articulación de fuentes de información primaria acerca de la violencia, delincuencia y criminalidad. Justificar el incremento de las estadísticas de la delincuencia por la facilidad de realizar denuncias, no es exacto, porque el incremento de denuncias solo explica la reducción de la ‘cifra negra’; y no se reconoce que la recolección de información debe complementarse con las detenciones, registro policial, reportes de morgue, hospitales, datos del sistema de justicia, tribunales, gestión procesal, fiscalía, centros de detención y rehabilitación.
La recolección de los datos por sí solo no es suficiente, porque el Observatorio debe seguir un procesamiento completo, desde la denuncia, el proceso penal, la sentencia y el cumplimiento de la sanción, para luego elaborar los informes de situación.
Insumos que sirven para el diagnóstico, diseño de las políticas públicas y una estrategia. Proceso que no termina sino después del monitoreo, evaluación y rendición de cuentas de los resultados de políticas públicas.
Indiscutiblemente que la reforma legal y de la justicia es un avance notable, pero no hay un observatorio nacional de seguridad ciudadana, por lo tanto los datos, índices, y tasas no son nacionales ni confiables por ende su manejo se torna arbitrario e impide una rendición de cuentas seria y responsable.