Vialidad y servicios básicos en Ecuador
Cada vez que el invierno azota al Ecuador resurgen obras pendientes, sin concluir y olvidadas en vialidad y servicios básicos.
Ya sea que faltó planificación, recursos o hubo ineficiencia de anteriores o actuales administraciones, hoy la ciudadanía demanda inversión en obra pública.
Vialidad, agua potable, alcantarillado sanitario, pluvial y saneamiento ambiental debieran estar entre las prioridades.
Sobre todo en zonas rurales relacionadas con producción agrícola y ganadera y que claman por una reactivación económica.
En 14 años, el enfoque estuvo en carreteras principales con una inversión superior a USD 15 000 millones. Esto según un informe del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF).
Pero este gasto sigue siendo cuestionado por vicios de corrupción e ineficiencia. A esto se añade la falta de mantenimiento.
Hoy, de los 10 290 km de vías estatales, apenas el 13% está en muy buen estado y 41% en buen estado. El restante 46% (4 706 km) se encuentra en estado regular o en pésimas condiciones.
Por otra parte, las deficiencias de agua potable, alcantarillado y saneamiento ambiental en zonas rurales, alejadas y sobrepobladas requieren acciones de los gobiernos autónomos descentralizados.
Estas obras cobran importancia cuando, de forma inusual, ya se registran 65 casos de Leptospirosis.
Esta enfermedad se transmite por bacterias que sobreviven durante semanas hasta meses en el agua y la tierra contaminadas con orina de roedores.
Reportes de vigilancia epidemiológica del Ministerio de Salud alertaron del aumento de casos en Guayas, Manabí y Santo Domingo de los Tsáchilas.
En esta última provincia, por ejemplo, hay tres zonas sin alcantarillado sanitario e insalubres. Una persona ya perdió la vida por esta enfermedad endémica en el país, que se remonta al siglo XIX.
Un informe del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC)- con datos del 2020- registró a siete municipios sin ningún tipo de alcantarillado (sanitario, pluvial ni combinado). Otros 41 reportaron no tener alcantarillado sanitario y 136 no tenían alcantarillado combinado (sanitario y pluvial).
La muerte de una persona con Leptospirosis no debiera pasar desapercibida así como los errores cometidos en la década pasada en cuanto a vialidad.
Las obras que se realicen desde los gobiernos central, local y provincial tienen que estar sustentadas técnicamente.
Asimismo, lo ideal sería que generen un impacto positivo en lo productivo y ambiental, pero además que puedan mantenerse en el futuro.