Para el Ecuador, el plazo de diciembre de 2016 será inexorable. Las preferencias arancelarias (Sistema General de Preferencias Plus) cesarán y quedaremos en condiciones difíciles para competir en el mercado europeo con nuestros vecinos, Colombia y Perú.
Por esa razón, las autoridades nacionales adelantan todo tipo de gestiones en el marco de la Unión Europea, que nos abrirá la oportunidad de llegar en condiciones adecuadas a un universo de 28 países y con capacidad adquisitiva, pese a sus propias dificultades.
Es verdad que antes desperdiciamos tiempo y opciones que luego fueron revertidas con un gran esfuerzo para cerrar las negociaciones. Un freno a la velocidad del proceso se produjo por fuerza mayor. Las salvaguardias y sobre tasas arancelarias que modificaron las condiciones de intercambio comercial para los productos procedentes de Europa, retardaron la apertura. Este año, y cuando se había establecido un calendario de desmontaje de las restricciones, el terremoto cambió el mapa.
El Gobierno afinó una estrategia para explicar la gravedad del problema y buscar comprensión. Esa ha sido la misión al más alto nivel de estos días en la que, según el Ministro de Comercio Exterior, empeña el 95% del esfuerzo. En todo caso, advirtió Juan Carlos Cassinelli, se trabaja en alternativas. Los exportadores están preocupados. El país espera que las gestiones lleguen a buen puerto y se abran las puertas para exportar a Europa y generar empleo.