El país ya forma parte de la lista de nueve países del continente que han reportado malformaciones congénitas asociadas al virus del Zika.
Según los datos de la Organización Mundial de la Salud, en América llegan hasta ahora a 2 961 los casos de neonatos con afectaciones neurológicas. El mal conlleva la microcefalia, lo cual obliga a un seguimiento de los casos.
Los registros del Ministerio de Salud señalan que hay 400 madres embarazadas con zika. 185 niños nacieron ya y nueve son portadores del virus -transmisión vertical- durante el embarazo.
Cuatro de ellos no han mostrado complicaciones. Dos más se hallan en observación y tres -reportados en Manabí- han sido declarados en control debido al trastorno que afecta al sistema neurológico con un menor desarrollo del cerebro.
El zika se adquiere por la picadura del mosquito Aedes aegypti, además transmisor del dengue y el chikungunya.
La ministra Verónica Espinosa, especialista en salubridad, dice que el riesgo es mayor si el virus se adquiere en los tres primeros meses de embarazo.
El ministerio del ramo ha publicado una guía para la detección y recomienda exámenes periódicos durante los primeros cuatro años de los niños en potencial riesgo.
El acompañamiento debe ser con estimulación temprana, fisioterapia y apoyo sicológico.
Es importante que el sistema de salud dé todas las alertas y se sepa actuar.