Colombia al balotaje
Colombia votó el domingo en paz. Esa es la buena noticia, aunque la segunda vuelta se predice tensa e impredecible.
Aunque a priori, la diferencia entre Iván Duque, del derechista Centro Democrático, y Gustavo Petro, de la coalición izquierdista Colombia Humana, es considerable ( 14 puntos porcentuales), la campaña arrancó nuevamente la misma noche de este domingo.
Duque (uribista) y Petro(ex M-19) dejaron traslucir que acercan discursos al centro para captar los votos que en la primera vuelta les fueron esquivos.
Uno de los aspectos que no cabe perder de vista es el grado de polarización de una campaña electoral que tuvo y tiene como telón de fondo los acuerdos de paz del régimen de Juan Manuel Santos con la guerrilla de las FARC.
Los contenidos de esa firma entrañan desacuerdos y descontento debido a que pudieran parecerse a la impunidad. Se cuestionan las concesiones políticas a favor de los insurgentes en el largo conflicto que costó 250 000 vidas.
Si Duque lograra sumar la mayoría de votos de Javier Vargas Lleras y apenas la mitad de los de Sergio Fajardo, se podría considerar presidente, pero el apoyo de la coalición de este último -la auténtica sorpresa que burló los sondeos para sumar el 23%- no se puede dar por descontado.
Pero las sumas y restas no son operaciones válidas cuando de política se trata. Los votos no son endosables y esa sola consideración promete una campaña de segunda vuelta muy dura.