El Gobierno trabaja a dos ritmos en materia laboral. Por un lado, antes de que finalice el año tiene previsto enviar a la Asamblea un paquete de reformas laborales, en la línea de lo acordado con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Por otro, necesita tomar medidas urgentes para evitar un mayor deterioro del empleo.
Hasta el primer trimestre de este año, solo un 38% de la población económicamente activa tenía un empleo adecuado, donde se paga al menos el salario básico, se proporciona seguridad social al trabajador y se cumplen las leyes laborales. Es la cifra más baja desde que existen cifras comparables en el INEC, lo cual evidencia que la mayoría de la población -un 62%- no tiene trabajo o lo tiene de baja calidad. Eso es evidente en las calles de las grandes ciudades, donde la informalidad gana espacio.
El deterioro del empleo pareciera inevitable en los próximos meses, debido a la reducción de la burocracia y la menor inversión estatal, producto del saneamiento fiscal.
Para amortiguar el impacto en el empleo, y considerando las rigideces de una economía dolarizada, la válvula de escape es flexibilizar el mercado laboral, una tarea sensible porque de por medio están los derechos adquiridos de los trabajadores.
De ahí la importancia del acuerdo alcanzado el miércoles pasado por los representantes de trabajadores, empresarios y Gobierno en el Consejo Nacional de Trabajo y Salarios.
Esa es la instancia donde los actores involucrados llevan a cabo un diálogo tripartito con el objetivo de definir políticas laborales.
Así lo han hecho, y lograron consensos en tres temas: distribución de la jornada laboral de 40 horas en distintos días de la semana; un contrato especial para nuevos emprendimientos, con el fin de evitar el pago de indemnizaciones por despido intempestivo si la empresa quiebra, y la eliminación del recargo del 35% en contratos eventuales y ocasionales.
Ese acuerdo tripartito le da fuerza a las reformas que se presentarán en los próximos días a la Asamblea, donde una nueva mayoría parece abierta a este tipo de reformas.