El Gobierno anunció, la noche del lunes 23 de marzo del 2020, su decisión de pagar USD 325 millones a acreedores tenedores de bonos del Ecuador, monto que corresponde al vencimiento de capital sin intereses de los bonos identificados como 2020, denominados así por el año de exigibilidad, para conservar el buen nombre del Ecuador como pagador, lo que generaría que de inmediato -se lo ha dicho literalmente- recibiríamos del FMI, del Banco Mundial, del BID, de entidades financieras de gobiernos extranjeros y de otros posibles proveedores de recursos, USD 2 000 millones.
La realidad es bastante diferente.
El martes 24 no se iba a proveer los recursos para pagar los USD 325 millones, porque toda la semana anterior -del lunes 16 al viernes 20 de marzo- ya se fueron haciendo las provisiones para revalorizar los bonos a vencer el martes. El Gobierno debería transparentar como se fueron haciendo las provisiones, pues en la gráfica de la revalorización queda evidenciado como de un valor muy reducido al lunes 16, inicio de la semana anterior, al llegar al 19 y al 20 de marzo el valor de los bonos se trepó por encima del 90%. Los tenedores de bonos -posiblemente algunos recién adquirentes, que se enriquecieron al haberlos adquiridos a precios reducidos, para cobrarlos a los pocos días a valor nominal- no serán los proveedores de los USD 2 000 millones, que se estaría esperando recibir no en forma inmediata, sino en la segunda quincena de abril del 2020.
¿Tales futuros proveedores de recursos condicionaron al Ecuador que pague los USD 325 millones, para autorizar en abril créditos por USD 2.000 millones?, no lo creo.
Los desembolsos de los USD 2 000 millones podrán iniciarse en la segunda quincena de abril. Los recursos de organismos multilaterales serán con condiciones a su aprobación y a los desembolsos siguientes, porque no serán de un solo desembolso.
Lo hecho por Argentina y por Ecuador, en los mismos días, es muy diferente. Argentina, con respaldo explícito del FMI, le dijo a los tenedores de bonos que aplicaría la cláusula de “mora técnica”, constante en todas las emisiones de bonos, para suspender los pagos por treinta días, de capital e intereses. El Ecuador sólo está aplicando tal cláusula al segmento reducido de intereses, y como lo programaría para otros segmentos de intereses que aún no son exigibles, se menciona la cifra de USD 200 millones.
Esa cláusula no constituye default, sino que permite negociación con más tiempo los valores a pagar.
A la Argentina rebelde, al cierre del lunes 23, el mercado le mantuvo el riesgo país en 4 362 puntos. Al Ecuador, que, días atrás tenía menos riesgo país que Argentina, se lo elevaron a 6 063 puntos, quedando por encima solo Venezuela que llegó a 15 501 puntos.