El gobierno redujo el subsidio general de la gasolina extra y ecopaís, manteniéndolo para taxis y transporte público. Proveniente del vocablo latín “subsidium”: “ayuda, auxilio, protección”, el término subsidio corresponde a un apoyo público, por tiempo determinado, a beneficiarios vulnerables focalizados, para propiciar su acceso a productos o servicios estratégicos. Visto desde esta óptica el subsidio a la gasolina en el país se aparta de sus parámetros de sustentación, habiéndose mantenido por temor de los gobiernos al costo político de una medida antipopular.
En salud, hace años, en países con debilidades en sus sistemas de salud, era usual focalizar acciones mediante “programas verticales” dirigidos puntualmente: al control de la natalidad; a vacunación o rehidratación oral; a enfermedades como malaria o tuberculosis; tiempo después VIH-SIDA, entre otros.
Más allá de ciertos logros, los programas focalizados fragmentaban la gestión con estructuras paralelas que competían entre sí, limitaban el desarrollo de modelos articulados de atención e impedían el establecimiento de sistemas integrados de salud.
Si la “política” de salud – de megahospitales – del gobierno anterior fue equivocada, la actual tampoco acierta.
Mientras “urbi et orbi” existe consenso en la necesidad de avanzar hacia la Cobertura Universal de Salud, el “Gobierno de Todos” reedita prácticas arcaicas para focalizar acciones, con un paupérrimo rendimiento. Efectivamente, la publicidad oficial destaca en estos días que su programa estandarte “Médico del Barrio” atendió “en lo que va del 2018, a cerca de 300.000 pacientes en todo el país”, identificando “71.125 casos de vulnerabilidad”. A ese ritmo, en el tiempo que le queda al gobierno, no habrá atendido ni al 6% de la población del Ecuador.
Al parecer el presidente Lenin Moreno desconoce que, organizando adecuadamente el trabajo de personal de salud existente, un millar de equipos de salud podrían duplicar en un mes la producción publicitada y en un año llegar a más de 7 millones de personas de barrios y comunidades marginadas con atención primaria de salud de calidad. La identificación y seguimiento de personas vulnerables estaría garantizada por un acompañamiento cercano.
Ecuador se encaminaría hacia el objetivo mundial de garantizar acceso a servicios de salud para todos, ratificado el 12 de Diciembre pasado en el “Día internacional de la Cobertura Sanitaria Universal”, declarado por la Asamblea General de la ONU en 2017.
Si desde la teoría económica es necesario focalizar los subsidios, desde el ejercicio del derecho a la salud es imperativo universalizar acciones de salud. Universalizar no se opone a focalizar; al contrario es garantía de llegar con eficiencia a quienes más lo necesitan.