Se ha abierto nuevamente la investigación de este penoso caso, por lo que deben considerarse todas las posibilidades de su desaparición, incluyendo el muy probable accidente en la quebrada Pacha.
Incluir el accidente en la investigación traerá a la realidad el análisis, sacándolo de las pasiones y odios humanos y la fantasía que lo han dominado. Solo una completa investigación traerá paz a todos los afectados. Escribo esto, pues tengo amplia experiencia por la desaparición de mi padre hace 47 años y, coincidencialmente, por vivir en Cumbayá recorrí más de 14 000 veces la Vía Interoceánica con su desaparecida curva de la muerte.