Hay tiempos y circunstancias de espera, porque tan severos son los impactos que se viven, que generan acumulación de interrogantes sin respuestas, lo que obliga a buscarlas.
Lo vivimos en los hogares, ante la muerte sorpresiva de seres queridos. Anímicamente, es muy difícil de asimilarla para los que siguen viviendo. Llegar a la condición de aceptar la tragedia como irreparable y rearmar un escenario de vida, siempre es difícil.
El 24 de Mayo del 2021, como país, el Ecuador, con el nuevo gobierno, se enfrentará a lo que está por venir, sobre lo que hay múltiples expectativas.
La gran mayoría de la población está en angustia profunda por la caída del ingreso, agravada por los confinamientos obligatorios, en el caso de quienes requieren ingresos día a día para sobrevivir.
La crisis fiscal es muy aguda, la capacidad de pago sólo se dará por desembolso de endeudamiento público.
Sobre bienes y servicios esenciales estará la presión de incrementos de precios. Se ha dado en la transportación interprovincial e intercantonal. Y está en el transporte en Quito y Guayaquil. Y vendrán otros precios al alza.
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asso se viene moviendo con habilidad en sus pronunciamientos, ofrece transparencia: y, aun cuando tiene claro el ahogamiento de las cuentas fiscales, no está asumiendo que debe incrementar sus cargas.
En lo político, en la Asamblea Nacional, bien sabe el bloque del correato, que salvo un acuerdo de PSC, CREO, Pachakutik e ID y otros asambleístas que no integran esos bloques, ellos son esenciales para hacer mayoría con PSC y CREO; o, con Pachakutik e ID; pero, ¿cuál es su condición, para uno u otro supuesto? Está por conocerse; pero, lo indispensable, es que todo sea transparente. El rechazo nacional es a que el supuesto “reencuentro nacional” pase por “perdón y olvido” para la corrupción, con herramientas orientadas para ese
Hasta ahora, de lo que se conoce, el pedido de los del correato es la formación de una supuesta “comisión de la verdad”, para que revise todo lo actuado en Contraloría, en Fiscalía, en la Función Judicial y en la Corte Constitucional, en cuanto a responsabilidades acusadas y a pronunciamientos y a fallos producidos. En el fondo será para intervenciones de intimidación y advertencias a los que han actuado, en los espacios citados, y en otros y/o deban actuar, a lo que podrían seguir procesamientos contra aquellos; en otros a perseguir justificar recursos extraordinarios de revisión en lo penal, contra fallos ejecutoriados, para obtener declaraciones de inocencia; pero, no podría pasar de ser espacio de interminables confrontaciones, fuego cruzado de cuestionamientos, una especie de múltiples “masturbaciones”, que se queden en excitaciones políticas.